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Primavera en las Fuentes del Sil y ascensión a Peña Orniz

Domingo, 13 de Mayo de 2012
Poco a poco este mes de Mayo nos va devolviendo a la primavera, así pues ojolince y sra. vamos a sumergirnos en ella para aprovecharnos del ansiado agua que nos está dejando.
Ojolince y sra. en la majada de Covalancha, respaldados por Peña Chana, Los Años y Punta la Sierra
Hoy hemos elegido como destino el nacimiento del río Sil, allá por 'tierras Babianas' entre las provincias de León y Asturias.
      Ojolince junto al puente que da acceso al pueblo de La Cueta
Como siempre que vamos a tierras del norte de Léon, el madrugón es inevitable pero, mañana es fiesta en Pucela y podremos descansar lo necesario.
Así pues a las seis de la mañana 'toca diana' el despertador y ojolince y sra. se ponen en camino.

Únicamente nos detenemos en Huergas de Babia donde siempre encontramos un bar abierto, de un amable paisano que nos informa de cómo está la montaña y nos da el pronóstico meteorológico para el día.
eSrá toma la pista que sale de La Cueta paralela al río Sil     

De allí, pocos kilómetros nos restan para llegar a La Cueta; aldea leonesa de donde parten muchas rutas que te internan al corazón de la montaña babiano-somedana. Se encuentra a 1.450 mts., resultando ser el más alto de la provincia de León.

Antes de entrar en La Cueta hay un pequeño aparcamiento; allí comenzamos a preparar nuestra equipación para pasar el día en la montaña. Mientras tanto van llegando otros dos vehículos; el primero, con un grupo de tres y el segundo, una pareja con dos niñas de 10 y 7 años que... ¡atenta la caballería!... hicieron cumbre en Peña Orniz, con sus papás y ojolince y sra.
      Senda señalizada a las Fuentes del Sil
Emprendemos la senda atravesando la pequeña población y siguiendo las indicaciones de los postes de señalización hacia las Fuentes del Sil.

La pista que tomamos nos lleva hacia una cancela que podemos rebasar por uno u otro lados, situándonos en la margen derecha del recién nacido y alborotado  río Sil .

En este primer tramo el estruendo del crecido Sil, debido al rápido deshielo por la subida de temperaturas, llega a ser atronador por lo que tomamos algunas imágenes de sus increíbles saltos de agua.
En menos de media hora nuestra cómoda pista se convierte en senda, al cruzar el puente de Bustusil que nuevamente nos sitúa en la margen izquierda del río.
          Dactylorhiza sambucina (variedad fucsia)                                     Dactylorhiza sambucina (variedad lutea)

La vegetación, que hasta este momento era principalmente arbustiva, comienza a cobrar colorido con amarillas primaveras, azules carrasquillas, brillantes ranúnculos y dos tonalidades de la orquídea Dactylorhiza sambucina. ¡Todo un despliege de color!
El Sil se va encajonando a medida que ganamos altura y es alimentado por arroyos y resurgencias de agua; la de mayor caudal, en esta parte de la senda, se conoce como Fuente Bocanegra.
eSrá en el paraje de la Fuente Bocanegra; al fondo los picos de las Morteras     
En este entorno descubrimos la presencia de la lagartija serrana, de un tamaño y confianza considerables.


eSrá fotografía una hembra de 'serrana' más bien pequeña, en comparación con las dimensiones de otros ejemplares que vemos por la zona



Iberolacerta monticola
(lagartija serrana)

Avanzamos por nuestra senda tomando el desvío hacia la izquierda y ganando más altura, lo que nos separa del río que gira en dirección sureste hacia la majada Abeséu.
Nos vamos aproximando al lugar conocido como Praderas de Cebolléu que, este año y en estas fechas, gozan de buena salud...
      eSrá llegando a las praderas de Cebolléu; al fondo los picos de la Mortera
Esta pradería rezuma vida por los cuatro costados asi que nos cuesta poco realizar algún avistamiento interesante...
                                                                           Emberiza hortulana - Ortolan Bunting       
El macho de escribano hortelano campa a sus anchas por esta pradería y, con total confianza ante nuestra presencia, se coloca en posaderos bien visibles para lanzar su repetitivo canto, exhibiendo su babero amarillo a la posible pareja.

También frecuentan la zona acentor comúnbisbita ribereño-alpino y lavandera blanca, además de la abundante collalba gris que lo puebla todo en primavera.

Rupicapra Pyrenaica parva

Se cruzan en nuestro camino tres ejemplares de rebeco, eso sí bastante asustados, que de un salto vadean el mismo arroyo que nosotros debemos atravesar para, tomando rumbo este, dejar atrás la bonita pradería de Cebolléu.

 Atravesado el arroyo, la senda se vuelve ascendente y el panorama comienza a ser verdaderamente montañero.
Desde la ascensión a la majada de Covalancha, se distingue al fondo el Pico Cuetalbo
Dejamos atrás al ganado que descansa en la verde pradería y, tras unos minutos, alcanzamos la majada de Covalancha a 1.750 mts., donde hay una edificación a modo de refugio.
      Zoom al Pico Montihuero desde el puerto de Covalancha
Coincidimos aquí con la familia del aparcamiento que está haciendo un descanso, pues la senda coge ahora mayor desnivel, para alcanzar los 1.880 mts. de los puertos de Covalancha.

Llegados al puerto, reconocemos varias de las cumbres de mayor notoriedad de la montaña babiana; cabe destacar el pico Montihuero donde una importante capa de hielo nos impidió, en el mes de Enero, coronar sus 2.187 mts.
Ojolince desciende el puerto de Covalancha; a la izquierda Peña Orniz y la Cervata a la derecha
Toca ahora comenzar el descenso hacia las fuentes del Sil, cuyo cauce hemos dejado muy abajo en una gran curva a nuestra derecha.
Chova piquirroja y piquigualda se dejan ver con facilidad. También distinguimos un vuelo de roquero rojo que se coloca en un posadero a bastante distancia.
En cuanto a plantas, genciana de primavera, gagea sp. y ranúnculo blanco, se abren paso entre neveros que se deshacen con rapidez.
    Ranunculus amplexicaulis

Atravesamos numerosas torrenteras y fuentes que bajan alegres al encuentro del río y, de nuevo, la senda nos obliga al ascenso hacia la collada que será la antesala de ascensión a Peña Orniz.

        Ojolince junto al hitón de la collada, a su espalda La Calabazosa

La vertiente asturiana de Somiedo asoma al otro lado de esta collada, justo en la dirección que vamos a tomar para ascender la Peña Orniz.

Ojolince afianza el paso, durante el esfuerzo de ascensión; pero eSrá le retrasa cuando localiza un endemismo subalpino que únicamente se da en la Cordillera Cantábrica, Pirineos, S.Nevada y S.Ibérico.

Se trata de la saxifraga purpúrea que coloniza suelos pedregosos en lugares donde la nieve perdura.
      Saxifraga oppositifolia


Poco más abajo, sigue nuestros pasos la alegre familia,
de la que ya nos hemos hecho compañeros.
Durante la senda de subida a Peña Orniz impacta la vista del valle de Cuetalbo (por donde hemos venido) y su pradería salpicada de neveros que alimentan las fuentes del Sil; destacando, al fondo, el imponente pico Montihuero.

Un último nevero por cruzar y alcanzamos la paramera previa a la cumbre con unas vistas impresionantes...

El Lago del Valle (Somiedo), rodeado de todas sus cumbres y un paraje de apariencia 'lunar', están ahí abajo...
Un zoom hacia el Lago del Valle, nos deja ver el arranque del mismo y la bruma de la vertiente asturiana...
Escuchamos las voces de 'la familia' que ya está llegando. Y son ellos quienes nos sacan esta foto de cumbre.
Ojolince y sra. en Peña Orniz a 2.194 mts.
Charlando animadamente convencemos a las dos pequeñas para que dejen un 'escrito de cumbres' en el buzón, donde cuenten su experiencia.
Al este se encuentra el macizo de las Ubiñas, con el Morronegro delante   
'La familia' decide bajar para comer y ojolince y sra. nos quedamos aquí para degustar nuestro bocata con 'la mejor de las vistas'. Al tiempo llega otro grupo de montañeros que vienen de la Farrapona y que, como nos sucedió a nosotros, se sorprenden de la cumbre alcanzada por las pequeñas. Por último, antes de bajar, ojolince hace un video panorámico que, como no podía ser de otra manera, nos anima a seguir subiendo picos... VIDEO DE CUMBRE 
      Ojolince desciende hacia el collado de Orniz

El descenso lo hacemos hacia el cordal del Cuetalbo, en dirección oeste.

Una vez alcanzado el collado de Orniz, tomamos la senda que nos parece más acertada para llegar al fondo del valle donde confluyen las numerosas fuentes del Sil, bien alimentadas de neveros.


Atravesando neveros hacia el valle de Cuetalbo
Ojolince busca la mejor forma de llegar al fondo del valle, presidido por el Montihuero.
Hacemos un alto en uno de los numerosos recintos de piedra que hay en el valle, decorados con un adelantado torvisco y poblado de numerosos Narcisus asturiensis.

Oímos un potente croar...

Uno de los encharcamientos del valle, presenta un abultado grupo de rana bermeja...
    Rana temporaria


Desde aquí tomamos la senda que asciende a los puertos y de ahí a la majada de Covalancha en un cómodo trayecto en bajada...
Ojolince y sra. llegando a la majada de Covalancha, al fondo los Picos Blancos
Desde aquí, desandando lo andado, retornamos a La Cueta, por la buena senda paralela al Sil.
El recorrido seguido se ha dibujado en línea roja     

PLANO Y PERFIL DEL RECORRIDO
Distancia Total -> 16 Kms. 
Desnivel -> 784 mts.
Tipo de Trazado -> lineal
Tiempo total -> 8 horas
Dificultad -> Media


GRÁFICA DEL RECORRIDO
Os mandamos un saludo a todos los lectores y seguidores.
Ojolince y sra.
**SED CONSCIENTES DE VUESTRAS LIMITACIONES PORQUE LA MONTAÑA PONE A CADA UNO EN SU SITIO**

Pájaro Moscón en Laguna de Duero 2012

Laguna de Duero, 2 de Mayo 2012
Pues sí... por sorprendete que parezca el pájaro moscón está anidando en nuestro pueblo.
      Remiz pendulinus
Durante uno de tantos momentos que ojolince y sra. dedicamos a la observación desde nuestra terraza de casa, nos damos cuenta de que, los pequeños jilgueros están llevándose la tela de los nidos de procesionaria que invade uno de los pinos piñoneros de la parcela.
      Macho de pájaro moscón deshaciendo un antiguo nido

Cual es nuestra sorpresa al comprobar que, entre ellos, asoma un pájaro moscón que enreda un hato de hilo para, al momento, 'tomar las de Villadiego' canal arriba.

Es entonces cuando decidimos que nosotros también nos vamos a dirigir canal arriba en su búsqueda: "árdua tarea".

Al día siguiente por la tarde, salimos 'a pajarear' por el canal en sentido contrario al que solemos tomar, hacia donde habíamos visto dirigirse al moscón, el día anterior.

En este tramo, a un lado y a otro, el canal del Duero presenta grandes y viejos chopos negros intercalados con algunos sauces, fresnos, tarays y olmos de antiguas reforestaciones.
      El material que recupera del antiguo nido, le emplea en la construcción del nuevo
Atentos a cualquier silbido lastimero que pueda llegar a nuestros oídos, alcanzamos un área con álamo blanco empleado por la zona para la delimitación entre tierras de labor.
El 'acróbata' macho de moscón retirando el material del nido antiguo   
Una de esas tierras, en baldío, en su parte más próxima al canal presenta bastante animación: colirrojos, jilgueros, herrerillos, carboneros, verderones y verdecillos, además de alguna curruca capirotada y más de un ruiseñor común, cantan incesantemente en la zona.

Hoy es un día ventoso y buscamos con detenimiento algún nido colgante entre las flexibles y oscilantes ramas de los álamos blancos...

¡Al fin! Una especie de botijo colgante... Este debe de ser...
Antiguos nidos de diferentes formas, encontrados en el mismo área que el que está construyendo el nuevo
Pero, unos minutos después nos damos cuenta de su mal estado y pensamos... habrá otro, ese parece de otro año...

Mientras seguirmos nuestra incesante búsqueda, como por arte de magia, se presenta ante nuestros ojos el macho de pájaro moscón...
Se sitúa primero en una rama contigua para, de un salto, colocarse en otro nido próximo al que habíamos descubierto inicialmente.
Penduline tit  -  Remiz pendulinus   
Este está en mejores condiciones pero, cual es nuestra sorpresa cuando nos damos cuenta que el moscón está deshaciendo el nido...

Tira y tira con fuerza, de las fibras vegetales que componen la bolsa que emplea por nido, para deshilarla y llevarse lo que enreda en su pico a otra parte, pero ¿dónde?

He aquí el siguiente hándicap: encontrar el nuevo nido 'en construcción'.

Tras un buen rato de idas y venidas entre la cerrada vegetación de la zona y siempre en la misma dirección, conseguimos dar con el nuevo...

Bien colocado, empleando tres ramitas flexilbles de un imponente álamo blanco, que sitúan al nido frente por frente de su tronco principal y le mimetizan con él.
Nuevo nido en construcción de pájaro moscón, aún sin completar
Nos damos cuenta de que la abertura que se observa no es la entrada, sino que el nido, aún no ha sido cerrado.
A posteriori, en una nueva visita, comprobamos como está completamente cerrado y buscamos la entrada en el lado contrario.
Nuevo nido que ya ha sido cerrado por la parte delantera
En el lado contrario, bien oculta en el enramado, encontramos la pequeña entrada a la bolsa-nido del moscón...
Tal y como ha situado la entrada nos van a resultar difíciles las observaciones y las tomas fotográficas del moscón y su prole, si es que este nido es del agrado de una hembra a la que el macho, desde que ha terminado la construcción, no para de reclamar.
Macho de pájaro moscón en una salicácea de su área      

Seguimos visitando periódica-
mente su área y, de este modo, le encontramos alimentán-
dose entre la espesura de sauces, tarays y demás arbustos...

Hemos leído, al respecto, que esperando a la hembra puede llegar a construir más de un nido...

Esperemos que éste no tenga que esperar demasiado, y pronto localicemos una hembra que le elija y termine la árdua labor comenzada por este macho.
Moscón alimentándose en una salicácea
Desde este espacio, seguiremos contando las peripecias del moscón y su posible familia...
Hasta pronto.
Ojolince y sra.