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Peña del Tejo y Coto Blanco desde Pino Llano

Viernes, 15 de Abril de 2.022
No nos resistimos. A comienzo de la primavera ¡Volvemos a la Montaña Palentina!
'Ojolince y Sra.' en peña del Tejo, compartiendo cielo con el gran Espigüete
      Troglodytes troglodytes - 'Chochín'

Viernes Santo y soleado, una irresistible combinación para disfrutar de la montaña.

De ahí que estemos a primera hora en el aparcamiento de Pino Llano, poco más adelante de Cardaño de Abajo.

'eSrá' en el puente sobre el arroyo de las Lomas, respaldada por el colosal Espigüete
Podarcis muralis - Lagartija roquera      
Nada más atravesar el arroyo de las Lomas, una vereda en dirección Sur nos permite ir junto a su curso, disfrutando de la emergente primavera. 
Pinzones, Escribanos, Chochines.. y un agradable bosquete de ribera al amparo del que crecen las tempranas Corydalis, nos llevan alegremente entretenidos a Puente Agudín.

Seguimos el curso del arroyo Lamas en dirección sur
Corydalis cava - Aristoloquia hueca      
En 2,5 kms. llegamos a Puente Agudín donde, a esta temprana hora, está casi vacío su aparcamiento.

Por la pista que sale a la izquierda de la carretera de los Pantanos, subimos hasta el camino que, en 850 mts., nos permite encontrar el sendero por el que damos comienzo nuestra ascensión.

'eSra' en la senda de ascensión, con vista al embalse de Camporredondo y a Cardaño de Abajo
      Bufo bufo - Sapo común
Primero por ladera terrosa carente de vegetación y, más tarde, entre los primeros brezos y escobas, ascendemos en dirección Norte hacia un bosquete de robles.

Esto propicia encuentros con la fauna local. Como el de este ejemplar de Sapo común entre las piedras.
Arrendajo, Cuco, Acentor y Picapinos se dejan oir a nuestro paso por el robledal.

'Ojolince' discurre por el joven robledal
      Gagea sp., una temprana liliácea
A la salida del robledal, nos encontramos en una amplia ladera pedregosa, limpia de vegetación.

Remontado el hombro pedregoso, alcanzamos una ladera herbosa salpicada de numerosas basales de orquídea y alguna liliácea florecida.

Unos metros por debajo distinguimos en la majada del Toro el chozo de Tierraconcejo, al que nos dirigimos.

Majada del Toro y chozo de Tierraconcejo a 1.558 mts.
Al fondo izda. peña del Tejo;  a la dcha. el redondeado 'coto de las Guerras'
Emberiza cia - Escribano montesino        
Una breve parada en el chozo de Tierraconcejo para hidratarnos y saludar al 'Escribano de la parcela'.

Mientras.. disfrutamos del aire fresco y las vistas del embalse de Camporredondo que nos regala este enclave.

Dejamos atrás la majada del Toro y su privilegiada ubicación

      'eSrá' ganando altura desde el collado, con magnífica vista al embalse de Camporredondo

Al chozo llega una pista que, en dirección Este y en menos de medio kilómetro, nos sitúa en un amplio collado a 1.590 mts. de altitud.

Es aquí donde, tras abandonar la pista, damos comienzo a la verdadera ascensión a peña del Tejo.


Astragalus incanus - Hierba cabrera o 'Estacarrocines'
En dirección Norte, vamos subiendo por terreno calizo, salpicado de algunas leguminosas que crecen bien a pleno sol, en estos terrenos yesíferos y secos, como la 'Hierba cabrera' también conocida como 'Estacarrocines'.

Gageas y Narcisos buscan el frescor junto a los cauces abiertos.

'Ojolince' avanza junto a una de las canales abiertas por los pequeños manantiales
Estas rampas herbosas dan paso a una ladera de escobas que dejamos a nuestra izda. para ascender, hacia el Este, por la inclinada ladera de rocas calizas.
Y de magníficas vistas..

Hacia el Sur, el embalse de Camporredondo y las sierras de la Peña y el Brezo
En las Cárcavas, saludando al gran 'Espi'          

Nos vamos aproximando a la cuerda, pues se nota que el aire viene fresco en altura.

Unos metros más de ascensión por estas cárcavas y ganamos el cordal.


Vista al W desde la cota previa a peña del Tejo; cresta caliza a 1.995 mts.
Cordal Espigüete, pico Murcia, Peñas Malas..
      Anthus spinoletta - Bisbita alpino

A esta altitud le gusta pasar el verano al Bisbita alpino, un ave paseriforme que elige terrenos pedregosos y baldíos para críar.

Avanzamos por la arista caliza en dirección NE y después de atravesar un pequeño collado, hacemos cumbre en peña del Tejo.

'eSrá' en peña del Tejo, a 1.998 mts.
Desde este cordal, las vistas del macizo de Fuentes Carrionas son un espectáculo
'Ojolince' en cota de 1.992 mts.        
La cuerda de peña del Tejo se prolonga hacia el Este, atractiva y disfrutona.

Cresteando, pasamos por todas sus cotas; ésta señalada con un hito.

'eSrá' bajando del cordal de peña del Tejo, con vista a Coto Blanco y cordal del Curavacas
A partir de aquí, comenzamos a bajar hacia un collado situado al NE, conocido como collado Valdetriollo o 'Las Sobadinas'.

Tenemos delante nuestro siguiente objetivo, el Coto Blanco.

'Ojolince' se abre paso hacia el collado Valdetriollo. Enfrente Coto Blanco o Párdigas
Zoom a las cimas del Curavacas      
Atravesado el tupido escobal, hemos descendido hasta los 1.920 mts. del collado Valdetriollo.

En dirección Norte, de nuevo entre escobas, salimos a una rampa rocosa señalada con hitos que habremos de seguir hasta hacer cumbre en Coto Blanco.

'Ojolince y Sra.' en el Párdigo o Coto Blanco, a 2.004 mts.
        Zoom a las Agujas de Cardaño

Son las dos y media de la tarde y se está agusto en la cima del Coto Blanco.

Nos sentamos junto a su vértice de piedras, para degustar un almuerzo de grandes vistas.


'Ojolince' al comienzo de la arista de bajada de Coto Blanco


Damos por concluido el descanso, y emprendemos descenso por la arista NE de Coto Blanco.


Nos servimos del buen agarre que nos proporciona la arista rocosa NE de Coto Blanco
Arabis sp. - Arabis      


Recorremos la práctica totalidad de la arista, hasta dar con una senda de piedra suelta en su ladera oeste por la que seguir descendiendo.

Unos cien metros de desnivel nos separan del collado que une Coto Blanco y Coto Negro. Éste último, más conocido como alto de los Calvillos.

Los últimos metros, de mayor inclinación y orientación norte, conservan un buen nevero aún duro, que bajamos con cuidado pues no llevamos material adecuado.



'eSrá' en el nevero de Coto Blanco.
Llegando al collado de los Calvillos (sestil del alto Madrona)
      Gentiana verna - Pastorcilla

Vamos recorriendo el collado de los Calvillos, hasta su punto más bajo, los 1.905 mts. de altitud.

A nuestra derecha, el valle de Valdetriollo (SE).

A la izquierda, hacia el NW, el valle de Las Lamas por donde vamos a descender.

Valle del arroyo de Las Lamas desde collado de Los Calvillos
Prunella modularis - Acentor común      

No hace mucho que ha desaparecido la nieve de esta inclinada ladera herbosa y ya ha dado comienzo la floración de las primeras Drabas, Arabis, Pastorcillas, Narcisos, Gageas..

Durante nuestro descenso, los acentores comunes de aspecto apagado y poco vistoso, se dejan ver entre la rala vegetación de esta ladera.

Llegando a una de las fuentes que nutren el arroyo de Las Lamas
      Erythronium dens-canis - Diente de Perro

Esta pradera herbosa cuenta con bastante humedad gracias a los regatos y arroyos que la salpican.

A medida que perdemos altura son otras las herbáceas que la pueblan. Diente de Perro, Poligala, Gagea.. y pronto aparece el escobal que debemos dejar a nuestra derecha.

Hacia el fondo del valle..
Primula veris - Primavera, Manguitos      
Nos encontramos en la zona donde se unen los dos arroyos principales del valle, y atravesamos el de la izquierda, para seguir nuestro descenso.

También a nuestra izquierda rebasamos una toma de agua con cerramiento metálico.

Poco más abajo nos podemos unir a una pista en buen estado, que lleva el arroyo Lamas a la izquierda.

Cuando el valle se estrecha, vemos el camino de Lamas
Progresamos por el camino de Lamas hasta dar con la bifurcación que sube a la bajera tenada de Lamas.
      Tenada de Lamas a 1.410 mts.
Nos desviamos unos metros para subir a conocerla.
Rosales, zarzas, espinos, agracejos... han hecho de ésta su casa.

Volvemos al camino principal para cerrar el círculo en el puente sobre el arroyo de las Lomas.


En Pino Llano, con la escultural figura de la ladera Este del Espigüete
Son más de las siete cuando llegamos al coche y rememoramos.. ¡Qué buena jornada hemos tenido hoy por 'la Palentina'!
PLANO Y PERFIL DEL RECORRIDO
DISTANCIA TOTAL -> 11,10 Kms.              TIPO DE TRAZADO ->  Circular
ASCENSIÓN ACUMULADA -> 800 mts.                TIEMPO TOTAL -> 8 h. 35'
'Ojolince y Sra.'
**SEAMOS CONSCIENTES DE NUESTRAS LIMITACIONES PORQUE LA MONTAÑA PONE A CADA UNO EN SU SITIO**

La Ribera del Pontón y los Arribes de Villardiegua

Sábado, 5 de Febrero de 2.022
Hace unos años de nuestra última visita a los Arribes del Duero y, en aquella ocasión, fueron los salmantinos. DE VILLARINO AL POZO DE LOS HUMOS
Hoy, nos dirigimos a la Comarca de Sayago en la provincia de Zamora, para asomarnos a algunos de sus balcones sobre el río Duero.
En el mirador del castro de San Mamede. Foto Lorena
'Lo' y 'eSrá' junto a una casa de arquitectura tradicional de Villardiegua
El pueblo del que partimos, Villardiegua de la Ribera, pertenece al Parque Natural de Arribes del Duero y bien merece una visita.

Sus casas bien conservadas de arquitectura tradicional, muros con piedras graníticas labradas, estelas romanas y pequeños verraquillos incrustados en las paredes de las viviendas..

Por el camino del Picón..

..su verraco vetón llamado 'La Mula' traído del cercano poblado de San Mamede, su templo parroquial del S. XVII.. no dejan indiferente al caminante.

Las 'Cortinas' delimitan las parcelas en la tierra de Sayago

Tenemos un interesante recorrido pensado para esta jornada, por lo que dejamos atrás Villardiegua tomando, en el extremo más occidental del pueblo, el camino del Picón.

Milvus milvus - Milano real, bajo un cielo azul

Arropados por buenos ejemplares de Quercus ilex, nos adentramos en el paraje de 'La Escornea' flanqueados por los muros graníticos bien trabajados, característicos de esta tierra y conocidos como 'Cortinas'


Arroyo del Pontón, 'cortinas', encinas y encharcamientos
Ranunculus peltatus - Hierba lagunera,
en las aguas remansadas del arroyo del Pontón

Este camino forma parte de la Senda del Duero, por lo que nos vamos a ir encontrando sus marcas rojas y blancas durante buena parte del recorrido de hoy.

Enseguida nos aproximamos a la ribera del arroyo del Pontón, junto al que vamos a ir disfrutando de sus molinos, cadozos, cortinas, roquedos, avifauna y vegetación.

Rústico molino de agua en la ribera del Pontón    
          Atravesamos amplias praderías.. 
  'Lo' y su 'Bola'        

Grandes rocas graníticas de redondeadas formas, comienzan a salpicar el entorno.

Estos berrocales, conforman un paisaje característico que parece emerger de entre la vegetación.

¡Podemos con ella!
      La puente del Caozo Llongo (Cadozo = olla, cavidad)

Dejamos a nuestra izquierda el magnífico puente del Caozo Llongo, maravilla pétrea sobre el cauce del Pontón.



Otro de los singulares puentes de piedra integrado en el paisaje
      Emberiza cia - Escribano montesino

Resguardados en uno de los roquedos, hacemos un breve parada para tomar un tentempié.

De este modo podemos escuchar a pinzones, escribanos e incluso un alcaudón que nos observa desde su oteadero no muy lejano.

Sobre el paso de piedras, junto a otro de los numerosos molinos que jalonan la ribera del Pontón
Detalle de la rústica construcción del molino de agua    

Avanzamos disfrutando de la diversidad que nos muestra el cauce del Pontón.

Agua y piedra se combinan de forma armoniosa en este paraje, salpicado de numerosos encharcamientos a modo de cadozos.

Bello enclave de la ribera del Pontón


      Mecanismos del interior del molino
Estos encharcamientos constituyen el refugio de ranas y tritones que se dejarán ver en primavera.

Mientras llega, podemos disfrutar de la belleza de esta vereda natural que discurre junto al lecho del arroyo.

De nuevo, vadeamos el Pontón que ha formado una amplia laguna
      En suave descenso hacia el valle del Pontón..
Conjunto minero  'Ribera del Pontón'      

La vereda nos conduce al lugar donde se localiza el yacimiento de oro conocido como 'Ribera del Pontón', de los siglos I al III d.C.


Cazoletas excavadas en las rocas graníticas donde se trituraba el oro hasta convertirlo en fina arena
Un panel de la Red de Espacios Naturales de JCyL, nos explica cómo se llevaba a cabo la extracción del preciado metal en tiempo de los Romanos.

Las tareas de extracción, triturado, lavado y separado de impurezas se realizaban en este entorno de la Ribera del Pontón.

Centro temático 'Parque Natural de Arribes del Duero' (lo encontramos sin uso)
Nos unimos al camino de Rita el Ciervo que, en dirección Sur, nos conduce al castro de San Mamede, también conocido como castro de Peña Redonda.

    Calendula arvensis, de atrevida floración
Estamos sobre los restos de un castro celtíbero construído en una colina que culmina en los cortados del arribanzo, como aquí se les conoce.

Un desnivel de 150 metros abierto por el río Duero de impresionante panorámica.

Los Arribanzos desde el mirador de San Mamede. Portugal, río Duero, España.
Lo y 'eSrá' sobre los restos de un chozo tradicional    
Después de asomarnos a ese impresionante mirador, junto a las ruinas de la ermita medieval de San Amede..

Subimos unos metros por este castro entre arbustos y encinas hasta alcanzar la peña Redonda, gran domo granítico de redondeada forma e impactante vista sobre el cañón.

Junto a la peña Redonda, impresionante atalaya sobre el cañón del Duero
    Leyendas que acompañan al caminante.
La Civerla (Roquero azul) y la Perdiz


Volvemos sobre nuestros pasos, por el camino de Rita El Ciervo, al encuentro del arroyo del Pontón.

Queremos dar continuidad a la senda que discurre junto a él, encajada en un barranco de bajada al río Duero, conocida como Sendero del Barranco de los Molinos.

Este camino y toda la zona hasta el pueblo de Villardiegua de la Ribera se están recuperando del pavoroso incendio que se desencadenó en Portugal el 22 de Agosto de 2.013 cuando, impulsadas por el fuerte viento, las llamas fueron capaces de saltar el Duero, arrasando este privilegiado entorno natural.


Hacia el Barranco de los Molinos, la vegetación aún joven, salpica el paisaje arribeño
Thaumetopoea herculeana - Procesionaria del suelo  

Hoy nos alegra la vista, esas verdes escobas que van alcanzando buen porte.

Y tomillos, salvias, helichrysum y otras aromáticas que, aun estando bajo el letargo invernal, nos impregnan con sus esencias al caminar.

En descenso por el sendero del barranco, nos vamos encontrando molinos
    Nos detenemos en cada cartel, para leer su fábula.
El Pardal (Gorrión común) y la Carbonera (Colirrojo tizón)

Vamos descendiendo al Duero junto al arroyo del Pontón, en un agradable paseo salpicado de fábulas protagonizadas por animales y añosos molinos.

Muchos de estos molinos se encuentran en buen estado, pues se han llevado a cabo tareas de rehabilitación.

Molino y cazoletas

Interior de un molino.
Rueda de moler y pila










Otros, por el contrario, se encuentran en estado de ruina, quedando en pie algo de su estructura.


Piedra, agua, vegetación y molinos
    Flor de Erodium

Avanzando por la estrecha vereda disfrutamos del rumor de las aguas, mientras pensamos en la ingeniosa manera del aprovechamiento de estos saltos para moler el cereal.


Algunos molinos están completamente encastrados en el barranco, para el buen aprovechamiento de las aguas
Molino al final del sendero del Barranco      

Y llegamos al último molino.

En la planicie junto al cortado, un banco de madera nos va a regalar un almuerzo con vistas.

¡El enclave de este banco arribeño no puede ser mejor!


El banco 'con vistas' de los Arribes de Villardiegua
    El Águila real y el Pedrero (Avión roquero)

Descansando, sentados en el estupendo banco, preparamos el almuerzo de la jornada.

La leyenda dice, y con razón, que éste es territorio del Águila real, y bien nos lo podemos imaginar sobrevolando el Duero o apostado en uno de sus cantiles.

Eso sí, los pequeños Aviones roqueros están constantemente volando de un lado a otro de estos cortados y, como dice la fábula, deben cuidarse mucho de la poderosa 'Real'.

Abajo, en los troncos secos que hay sobre las aguas, más de un Cormorán grande se solea, después de su baño en las aguas del gran Duero.

Durante el almuerzo hay tiempo para la observación y la fotografía
Tras el reparador almuerzo, emprendemos el camino de vuelta.

En el penúltimo molino, abandonamos la vereda por la que bajamos, para ascender por una ladera herbosa a nuestra izquierda.

     En el mirador 'Ribera del Pontón'
Guiados por hitos de piedra, enseguida alcanzamos el mirador 'Ribera del Pontón', donde se encuentra el cartel que explica el desastre que supuso el incendio y las actuaciones llevadas a cabo para la recuperación de este espacio natural.
      Por las peñas de la Tijonera


Un camino paralelo al río Duero, nos permite avanzar por las peñas de la Tijonera en dirección norte.



Pasamos junto a un chozo en ruinas    


Pocos minutos después, pasamos junto a los restos de un antiguo chozo de piedra.


Crocus carpetanus - Azafrán serrano, de temprana floración

Es aquí donde empieza nuestro descenso para llegar al último de los miradores que vamos a conocer hoy.

Algunas aves nos acompañan durante este trayecto.

Alondras y Tarabillas se dejan ver y oir en este tranquilo territorio.

Atravesamos el arroyo del Pozaco y nos adentramos por terreno bien crecido de vegetación, para aproximarnos a los cortados y alcanzar el mirador.


El grupo se dirige hacia los cortados para disfrutar de otro balcón sobre el Duero
      En el despeñadero de la Siniestra



En pocos metros, llegamos a la espléndida atalaya sobre el Duero.




'Lo' y 'eSrá' se montan en una roca-moto      

Este es el paraje que se conoce como despeñadero de la Siniestra.

Las vistas de los cortados a uno y otro lados son portentosas.


Acantilados hacia la ermita portuguesa San Juan de los Arribes

Enfrente, la ermita de São João das Arribas (San Juan de los Arribes), perteneciente al municipio portugués de Miranda do Douro.



Por el camino de la Tijonera, de regreso a Villardiegua    

Solo nos falta encontrar el camino de la Tijonera que, con sus balizas verdi-blancas nos devolverá a Villardiegua de la Ribera, entre encinas y cortinas, como es de recibo en esta tierra.

* A tener en cuenta.-
Nos encontramos un vallado reciente que nos obligó a perimetrar una finca para poder unir el último mirador con el camino de la Tijonera.*

En cualquier caso, esta visita a Arribes ha sido todo un espectáculo.
No pasará tanto tiempo para que 'Ojolince y Sra.' repitamos.
PLANO Y PERFIL DEL RECORRIDO
DISTANCIA TOTAL -> 12,50 Kms.              TIPO DE TRAZADO ->  Circular
ASCENSIÓN ACUMULADA -> 304 mts.                TIEMPO TOTAL -> 5 h. 50'
'Ojolince y Sra.'
**SEAMOS CONSCIENTES DE NUESTRAS LIMITACIONES PORQUE LA MONTAÑA PONE A CADA UNO EN SU SITIO**