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El Cordal de la Sierra de la Peña y el valle de Tosande. 2ª Parte

Sábado, 12 de Julio de 2014
Antes de inciar nuestro periodo vacacional, dejamos relatada en el blog la primera parte de la ruta por cumbres y valles de Tosande en tierras Palentinas, que puedes leer AQUÍ.
'eSrá' en la Silla pequeña, con el cordal de cumbres recorrido a su espalda
      Globularia repens - Siemprejunta


Como nos suele suceder en las crónicas de periodo estival, ésta última estaba resultado algo extensa, por lo que decidimos dejarla inconclusa para retomar el relato a la vuelta de vacaciones.

Aglais urticae pareja de Ortigueras, sobre Ericillo


Así pues, 'Ojolince y Sra.' a casi las dos de la tarde, aún estamos encaramados en la Silla pequeña de la sierra de la Peña, buscando la mejor forma de alcanzar el collado de Tosande que nos lleve de vuelta al valle.


'Ojolince' durante el descenso de la Silla Pequeña. Al fondo el collado entre Burrianes y la omnipresente Peña Redonda a la izquierda
       Campanula hispanica - Campanilla de Cantil

Por la crestería seguimos encontrando especies propias de cantiles y roquedos como la Campanilla de Cantil Campanula hispanica, la Siemprejunta Globularia repens, el Ericillo Arenaria erinacea, el Alfiler de Roca Erodium glandulosum; además de la Siempreviva y el Ajo Allium palentinum.



'Ojolince' prosigue por la crestería hacia el alto de Burrián, que ya está 'a tiro de piedra'
Paeonia broteroi - Peonía o Rosa albardera     
Acompañados de numerosos lepidópteros, es ahora la Ortiguera, la mariposa de mayor abundancia.

Poco a poco, nos vamos aproximando al alto de Burrián y, sin hacer cumbre, comenzamos el descenso por su ladera este, pues pensamos que ésta es la mejor forma de alcanzar el collado de Tosande.

Un único ejemplar de Peonía ó Rosa albardera pone la nota de color a esta ladera...
      Cervus elaphus - Ciervo ♀
...junto a ésta, salta a la carrera una solitaria hembra de ciervo..
¡Qué susto nos llevamos por ambas partes!

Tras tomarle unas instantáneas, proseguimos el descenso por un terreno algo incómodo, entre grandes y agrietadas rocas y un almohadillado de juníperos, que no nos deja ver bien dónde pisamos.

Al fin, allí distinguimos el collado de Tosande, tras él asoma el Curavacas
Aún tenemos un tramo de descenso para después, buscando la media ladera del alto de Burrián, ganar fácilmente el collado de Tosande situado a 1.545 mts.
Anthus pratensis - Bisbita pratense     
Hacemos un buen descanso para almorzar y...

¡Qué mejor manera que acompañados de esta cantarina Bisbita pratense que nos distrae, desde su piedra cantadero, con sus miradas a uno y otro lados, mientras canta!


Vista del valle de Tosande durante el descenso del alto de Burrián; al fondo destaca el pico Almonga
Collado de Tosande y alto de Burrián, desde la ladera opuesta

En el transcurso de la jornada las nubes han ido incrementado su presencia.

Esto, nos ha impedido obtener buenas vistas de las principales cumbres de la montaña Palentina, como es lo habitual, desde el collado de Tosande.

Saponaria ocymoides - Jabonera de roca
Repuestos de la jornada mañanera, a las tres y media nos ponemos en marcha, avanzando por la ladera contraria a aquella por la que llegamos al collado.

En dirección este y siempre de referente el pico de los Pilones, vamos trazando el camino que nos llevará a la cabecera del valle de Tosande

Ojolince durante el trayecto de bajada hacia el valle
Una cierva curiosa se detiene a observar a 'Ojolince y Sra.'   
El arroyo de Tosande nace en las inmediaciones del collado y discurre en dirección este, hasta que se abre hacia el sur propiciando la formación del valle de Tosande.

'Ojolince y Sra.' seguimos la misma dirección del arroyo por una orografía algo más abrupta situada más al norte del curso del arroyo y, nos unimos a él, en el paraje conocido como Hoyo Serna.

Hoyo Serna, en la cabecera del valle de Tosande, junto a la base del pico de los Pilones
      Parnassius apollo - Apolo
Este lugar, como ya nos sucediera por la mañana en la pedregosa ladera de ascensión a la peña Cantoral, resulta un excelente habitat para la mariposa Apolo.

Ejemplares de diferentes tamaños y contrastadas tonalidades hacen acto de presencia para deleite de 'Ojolince y Sra.' que tenemos entretenimiento para rato.

    A la izquierda, ejemplar con contrastadas y grandes machas negras
Vemos dos ejemplares como el de la fotografía de la izquierda, que presentan un mayor número de machas negras y de mayor grosor pero, aunque estamos un buen rato tras ellos, no conseguirmos una sola fotografía de buena calidad.
 Estrecha canal por la que discurre el arroyo de Tosande, la mayor parte del tiempo,
sin aflorar a la superficie
Prunella grandiflora - Consuelda mayor, variedad alba

Seguimos con el reconocimiento de herbáceas, todavía 'montanas', pues aún estamos a cierta altitud, pero ya más propias de claros forestales y frescas laderas pedregosas.

Cardo azul Eryngium bourgatii, Angelitos Teucrium pyrenaicum, Jabonera de roca Saponaria ocymoides, Clavelina deshilachada Dianthus hyssopifolius, Consuelda mayor Prunella grandiflora en sus variedades azul y blanca;
además de algunas crasuláceas como la Uva de gato Sedum album y la Siempreviva menor Sedum forsterianum.


    Boloria selene - Perlada castaña

  Carcharodus lavatherae - Piquitos clara   
El recuento de mariposas también sigue en aumento con ejemplares de Blanca verdinerviada Pieris napi, Perlada castaña Boloria selene, Piquitos clara Carcharodus lavatherae, Niña hocecillas Plebejus argus, Atalia Melitaea celadussa.

Poco a poco vamos alcanzando las abiertas praderías de Las Roblizas.

Desde Las Roblizas, le echamos una mirada a la redondeada peña Cantoral, allá al fondo
 Ahora toca avanzar entre las 'bienguardadas' ganaderías del valle de Tosande
Neophron percnopterus - Alimoche     
Tras conversar y hacer entrar en razón a los mastines que guardan el ganado, llegamos a la Campa del Alimoche.

Pradería así llamada por 'Ojolince y Sra.' por haber visto esta primavera, en dos ocasiones allí mismo, una pareja que hoy, tampoco falta a su cita.

Melitaea y Zygaenas compartiendo alimento
Hasta esta campa, llegan muchas personas de todas edades y condición, pues se trata de un agradable y cómodo paseo desde el aparcamiento.

Seguimos el curso del arroyo Tosande que da vida al valle, y el camino aún nos depara alguna que otra sorpresa...

¡¡Una Ninfa de los Arroyos!!


Limenitis reducta - Ninfa de los Arroyos (vista ventral)
Ninfa de los Arroyos (vista dorsal)
Es la primera vez que 'Ojolince y Sra.' vemos a este ninfálido de gran envergadura, bello diseño y viva coloración.

Se trata de una especie presente en las zonas central y septentrional de la península ibérica, que gusta de suelos húmedos y visita, de forma habitual, las zarzas.

Thymelicus sylvestris - Dorada linea larga
Hespéridos como la Dorada oscura Thymelicus acteon y Dorada linea larga Thymelicus sylvestris; Pavo real Inachis io, C-Blanca Polygonia C-album, además de numerosísimas Melitaeas y Zygaenas nos acompañan hasta el final de nuestra ruta.

'Ojolince' en las proximidades del puente del tren, bajo el que hay que pasar para finalizar ruta
    Leuzea conifera - Cuchara de Pastor
Xeranthemum inapertum - Inmortal menor   
En lo que respecta a flores volvemos acompañados de un sinfin de aromas: Tomillos, Manzanillas, Milenramas...

Dactylorhiza maculata - Satirión manchado

Además de disfrutar de las variedades de Campanulas, Consueldas y Trigo vacuno en sus dos tonalidades; así como de especies menos habituales Cuchara de Pastor Leuzea conifera y la bella Inmortal menor Xeranthemum inapertum, totalmente abierta... ¡¡una suerte!!

Nos despedimos del valle y sus habitantes con la vista puesta en una pradería de orquídeas y los cantos del Escribano cerillo y Carbonero garrapinos, ocupados en la ceba de sus pequeños.
Periparus ater - Carbonero garrapinos     
Un sencillo paseo por estos parajes nos permite descubrir la inmesa riqueza de este valle y sus montañas.
¡¡Volveremos al valle de Tosande!!

Los datos técnicos del recorrido, así como la descarga del track, son los que ya compartimos en la primera parte de esta crónica.

PLANO Y PERFIL DEL RECORRIDO
    El trazado seguido está dibujado en línea verde. La chincheta señala el punto de comienzo de esta crónica.
DISTANCIA TOTAL -> 18,44 Kms.      ASCENSIÓN ACUMULADA -> 1.112 mts.

TIPO DE TRAZADO -> Circular                  TIEMPO TOTAL -> 10 h. 23'

DIFICULTAD -> Media
GRÁFICA DEL RECORRIDO COMPLETO                                               DESCARGA DEL TRACK
Ojolince y Sra.

** SED CONSCIENTES DE VUESTRAS LIMITACIONES PORQUE LA MONTAÑA PONE A CADA UNO EN SU SITIO**

El cordal de la Sierra de la Peña y el valle de Tosande. 1ª Parte

Sábado, 12 de Julio de 2014
Uno de los lugares favoritos de 'Ojolince y Sra.' en la montaña Palentina es el valle de Tosande.
'Ojolince y Sra.' en el mirador de la Tejeda de Tosande (Foto Javier Aizcorbe)
Por ello, se nos ocurren muchas posibilidades de recorrer la sierras aledañas para, una vez más, volver a disfrutar de la vida en este asombroso valle.
      Maniola jurtina - Loba ♀
Hace poco más de un mes que estuvimos con nuestros amigos Cántabros y Palentinos realizando la ruta de la Tejeda de Tosande.

Junto a ellos, tuvimos oportunidad de conocer la primavera en el valle, y traernos para casa una excelente muestra de la biodiversidad que alberga.

Sus crónicas reflejan fielmente lo que mencionamos, y podéis perder el gusto con su lectura.

Prunella grandiflora - Consuelda mayor   
Javier Aizcorbe nos lo cuenta en:
EL OTEADERO DE JAVI.
Mientras que Luis Herrero lo hace en: NATURALEZA DE LA VALDAVIA.

Thymelicus acteon - Dorada oscura








Hoy, tempranito...
'Ojolince y Sra.' nos situamos en el buen aparcamiento de Dehesa de Montejo, para dar comienzo nuestra circular por la sierra de la Peña y el valle de Tosande.
Ojolince avanza por la senda del valle de Tosande ¡Peña Cantoral al fondo, nos espera!
  Campanula glomerata - Campanilla aglomerada
No estamos dispuestos a entretenernos más de la cuenta pues el recorrido pensado es largo pero, la naturaleza siempre juega a su favor.

La olorosa Camomila Matricaria discoidea (Matricaria matricarioides) junto al camino, hace que le prestemos atención a la flora y así las cosas...

Consuelda mayor Prunella grandiflora (variedades azul-violácea y blanca), Escorzonera Scorzonera hispanica, Campanilla aglomerada Campanula glomerata, Silene legionensis, Zarzaparrilla de los muros Teucrium chamaedrys y Dedalera Digitalis purpurea salpican la primera parte de la senda.

Teucrium chamaedrys - Zarzaparrilla de los muros   

Entre ellas, en un ir y venir...

Lobas Maniola jurtina, Lobitos listado Pyronia bathseba, Atalias Melitaea athalia, Pedregosas Lasiommata maera, Saltacercas Lasiommata megera, Erebias de Prunner Erebia meolans, Sofías Issoria lathonia, Blancas de majuelo Aporia crataegi, Lunares de plata Argynnis algaja, Pandoras Argynnis pandora y algún hespérido como la Dorada oscura Thymelicus acteon y la Dorada línea larga Thymelicus sylvestris hacen a 'Ojolince y Sra.' romper su compromiso de avanzar a buen paso con la fresca.

La senda por el valle de Tosande nos introduce en un magnífico bosque mixto
Quejigos y encinas mezclados con el roble rebollo sustentan las laderas de estas sierras. Pronto, nos encontramos el puente de madera y el poste indicativo de la senda que nos introduce al hayedo.
Ojolince remonta la falda de peña Cantoral a la sombra del hayedo de Tosande
A la salida del hayedo, distinguimos el hombro de La Cantoral, donde nos dirigimos
Esta vereda conocida como La Senda de la Tejeda de Tosande, está señalizada y es de obligada visita pues, no debemos perdernos los tejos milenarios que pueblan la ladera norte de la peña Cantoral.

El hayedo se asciende mediante un zigzagueo constante que culmina en un bonito mirador, de excelentes vistas (foto de comienzo).

    'eSrá' entre dos Tejos (hace un mes), el día de la ruta con los amigos
Hasta este momento no hemos coincidido con nadie, salvo con una ardilla oculta en el enramado de las hayas.

En el mirador, charlamos unos minutos con una pareja que está almorzando, y juntos disfrutamos de la observación de un grupo de ciervos en carrera, ladera abajo de La Cantoral.

Continuamos por la senda hacia los tejos milenarios aunque no vamos a seguirla porque ésta, poco después, comienza a descender y se dirige de nuevo al valle.

'Ojolince y Sra.' picamos alto y nos vamos 'campo a través' en busca de la mariposa Apolo, que sabemos que tiene querencia por estas laderas pedregosas.


Una vista atrás, durante la ascensión a la Cantoral, nos devuelve esta imagen del hayedo y tejeda de Tosande
Sedum acre - Sedo picante     
Remontar esta ladera de fuerte inclinación es una árdua tarea pero vamos, poco a poco, pendientes de aquello que pisamos y todo lo que se mueve.

Las Dedaleras Digitalis purpurea, frecuentes hasta ahora, van dejando paso a su pariente las Calzas de Lobo Digitalis parviflora y... todo un abanico de crasuláceas.

Inflorescencia de la Dedalera - Digitalis purpurea
Digitalis parviflora - Calzas de Lobo 







Sedum forsterianum - Siempreviva menor 






Sedum album - Uva de gato    


Sedo picante Sedum acre, Uva de gato Sedum album, Siempreviva menor Sedum forsterianum y Siempreviva cantábrica Sempervivum cantabricum.

Abajo queda el valle de Tosande y al fondo...
comienzan a aparecer las grandes cumbres de la Montaña Palentina
    Un buen zoom y aproximamos la lejana vista del Curavacas

La empinada ladera por la que avanzamos es un auténtico pedregal.

De entre las grietas y roquedos calizos salen los Ericillos Arenaria erinacea, la Campanilla de Cantil Campanula hispanica y el Lino azul Linum narbonense, como si de un cuidado jardín se tratase.

Dianthus hyssopifolius - Clavelina deshilachada  
  Campanula hispanica - Campanilla de cantil











Ojolince pone rumbo al hombro de peña Cantoral
Pululando sobre estos pastos comienza el recital de la mariposa 'Apolo'.

Una y otra vez nos pasan cerca varios ejemplares, con ese rápido vuelo próximo al suelo que les caracteriza.

Decidimos no perseguirlas...

      Satyrium spini - Mancha azul (una pena que le falte la cola)


La Hierba sanjuanera Gallium verum y un abundantísimo Tomillo serpol Thymus serphyllum tapizan la pradería.

Con su aroma y delicioso polen atraen a un sinfín de lepidópteros y demás insectos.

Pyrgus cirsii - Ajedrezada tórrida

Niña esmaltada Plebejus idas, Ajedrezada tórrida Pyrgus cirsii, Mancha azul Satyrium spini, Manto de púrpura Lycaena alcyphron, Ninfa de Ésper Coenonympha dorus...

...son buen ejemplo de la larga lista de mariposas de la que disfrutamos hasta situarnos sobre el perfil de la sierra de la Peña, donde podemos deleitarnos 'a placer' con la gran Apolo.


Alcanzado el hombro de peña Cantoral y sus 1.660 mts., disponemos de inmejorables vistas a ambos lados de la sierra de la Peña
      Parnassius apollo - Apolo
La Erebia de Prunner Erebia meolans, la Ortiguera Aglais urticae y la Macaón Papilio machaon, junto con la hermosa Apolo Parnassius apollo,  estarán presentes durante este recorrido por las cumbres y collados de la sierra de la Peña.


Glasswing butterfly, mariposa de alas de cristal


Son más de las once y media cuando coronamos el perfil de esta sierra, desde el que se dominan amplias vistas.

Desde este hombro 'La Cantoral' tomamos dirección noroeste y seguimos el cordal que nos lleva al collado previo a la ascensión, propiamente dicha, de peña Cantoral.


Ojolince enfila hacia el collado. Peña Cantoral al fondo, nos espera


La vegetación a esta altitud va variando y las aromáticas, aún presentes, van siendo sustituídas por especies adaptadas a estos pastizales de alta montaña.

Abundante 'Bálsamo' Saxifraga cuneata y 'Ericillo' Arenaria erinacea, además de la subespecie serpyllifolia de Paronychia kapela.

Saxifraga cuneata - Bálsamo
 Un ejemplar macho de saltícido hace acto de presencia; 'eSrá' consigue inmortalizarle.
Philaeus chrysops






Paronychia kapela ssp. serpyllifolia - Sanguinaria o Plateada


Encontramos algunos ejemplares de la cariofilácea conocida como Sanguinaria o Plateada.

Recibe este nombre por sus grandes brácteas escarioso-plateadas que son el doble de grandes que las propias flores.

En un 'pis-pas' nos encontramos junto al collado de la Cantoral  y le atravesamos para dar comienzo a la ascensión de peña Cantoral.

El collado previo y peña Cantoral, donde nos dirigimos

    Zygaena lonicerae     
 
La subida, aunque 'pindia' no entraña dificultad, pero le dedicamos algunos minutos a recuperar el resuello, contemplar las cada vez mejores vistas y otear algún ave que hace su aparición.

Allá, a buena altura, una con pecho, vientre y alas muy blancos de puntas negras, nos hace pensar que se trata de un aguilucho pálido en dispersión.

Las vistas durante la ascensión a La Cantoral son cada vez más espectaculares
Macroglossum stellatarum - Esfinge colibrí     
En el hayedo, ya habíamos descubierto la presencia de pinzón, carbonero común, trepador azul, herrerillo común, escribano soteño, pico picapinos y arrendajo.

Pero ahora, por las crestas, son los buitres leonados y un par de alimoches los que nos ofrecen su compañía.

Superamos el último repecho y...

Cumbre en Peña Cantoral a 1.792 mts.
Vista aérea de La Meseta desde peña Cantoral. ¡Ancha es Castilla!
    Melanargia occitanica - Medioluto herrumbrosa

Hasta aquí hemos invertido unas tres horas, tiempo que se puede recortar bastante si se trata de otra época del año en la que el entretenimiento de observación y fotografía es menor.

A 'Ojolince y Sra.' no nos importa, el día es largo y... ¡¡el cordal promete!!

Coenonympha dorus - Ninfa de Esper en Ericillo
De peña Cantoral ponemos rumbo al collado de la Braña.

No existe senda definida ni hitos que la señalen pero, se avanza fácilmente por la línea de cumbres.

En este trayecto, estamos constantemente rebasados por las grandes 'Apolo'; además de Macaón, Ortigueras, Sofías, Erebias de Prunner, Medioluto herrumbrosa y Ninfa de Esper.

El collado de la Braña se encuentra a unos 1.750 mts. y nos hace perder altura para volver a ganarla en la ascensión a la peña Oracada u Horadada, que tenemos enfrente.

    'Ojolince' se dirige al collado de la Braña, con la vista puesta en peña Oracada
Antes de la una del mediodía, hacemos cumbre en La Oracada.
De izquierda a derecha: peña Redonda, 'eSrá' y 'Ojolince' sujetando el hitón de La Oracada
 Desde los 1.818 mts. de altitud de la peña Oracada se divisan estas inmejorables panorámicas:
Zoom a 'Peña Redonda'. Tras ella, el siempre magestuoso 'Espigüete'
Zoom al cordal del Curavacas     
Vamos bajando de peña Oracada y virando en dirección norte, dejamos a nuestra izquierda la prolongación de esta sierra con cotas no superiores a los 1.750 mts.

Muestra de ello son el pico de Campollano y el de los Collazos, que quedan a nuestra espalda mientras comenzamos el descenso al valle.

'eSrá' con la cabeza puesta sobre el verde valle al que nos disponemos a bajar
Pocos minutos nos ha llevado llegar hasta aquí.
 'Ojolince' avanza por la pradería en dirección al collado del Campillo
   Saxicola rubicola - joven de Tarabilla común alzando el vuelo

En esta pradería descansa y se alimenta un rebaño de ovejas bien guardado por un par de mastines que dan la voz de alarma.

Rodeándoles, pasamos sin suponerles ninguna molestia, pues tienen entre ellos numerosos lechazos.


Chaenorhinum origanifolium - Espuelilla       

No sólo vemos jóvenes en el rebaño, también las aves nos muestran sus retoños como esta tarabilla común, un escribano montesino y más de un bisbita común, que amenizan con sus idas y venidas estos pastos de altura.

Una vez en el collado que abre paso entre las estribaciones del pico de los Collazos y el pico Campillo decidimos volver a ganar altura.

La ascensión al Campillo no nos supone un gran esfuerzo, pues el desnivel a salvar desde el collado no llega a 60 mts.

Hecha cumbre en el pico Campillo, 'Ojolince' avanza por el cordal hacia las Sillas
     Sermpervivum cantabricum - Siempreviva cantábrica
Edemismos como el Helianthemum cantabricum y la Siempreviva cantábrica Sempervivum cantabricum están presentes en esta sierra de suelos predominantemente calizos.

Oreja de ratón Cerastium fontanum, Bálsamo Saxifraga cuneata, Ericillo Arenaria erinacea, Clavelillos Dianthus brachyanthus, Té de roca Sideritis hyssopifolia, Asiento de pastor Astragalus sempervirens, Aciano linguado Centaurea triumfetti, Espuelilla Chaenorhinum origanifolium, Siemprejunta Globularia repens y Alfiler de roca Erodium glandulosum son algunas de las especies que vamos localizando y fotografiando.


      Detalle de inflorescencia de la Siempreviva                            Flor del Alfiler de roca









Seguimos la crestería  pasando consecutivamente por las cumbres de la Silla grande 1.761 mts. y la Silla pequeña 1.758 mts.

'Ojolince' progresa por la crestería, con peña Redonda de referente
Desde aquí distinguimos la senda por la que, hace ya tres años, llegamos al collado entre Burrianes de acceso a la peña Redonda.
Tenéis una detallada crónica de aquel camino en: PEÑA REDONDA POR LAS CUMBRES DE TOSANDE
Llevamos más de cinco horas de recorrido y pretendemos bajar al collado de Tosande para comer, pero eso seguiremos relatándolo en otro capítulo que éste, ¡ya ha quedado suficientemente extenso!
PLANO Y PERFIL DEL RECORRIDO
    El trazado seguido está dibujado en línea verde. La chincheta señala el punto en que detenemos esta crónica.
DISTANCIA TOTAL -> 18,44 Kms.      ASCENSIÓN ACUMULADA -> 1.112 mts.
TIPO DE TRAZADO -> Circular                  TIEMPO TOTAL -> 10 h. 23'
DIFICULTAD -> Media
GRÁFICA DEL RECORRIDO COMPLETO                                               DESCARGA DEL TRACK
Continuará...
Ojolince y Sra.
** SED CONSCIENTES DE VUESTRAS LIMITACIONES PORQUE LA MONTAÑA PONE A CADA UNO EN SU SITIO**