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Mostrando entradas con la etiqueta Peña Santa Lucía. Mostrar todas las entradas
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Miradores de la Palentina. De Resoba a puente Pucherín

Domingo, 22 de Octubre de 2017
Como nos gusta el otoño en la Montaña Palentina, vamos a disfrutar de sus bosques y miradores por el camino a Vega de Liébana que une el valle Estrecho desde Resoba, con el valle de Pineda en puente Pucherín.
Ojolince y Sra.' junto al roble centenario de las Tenadas de Resoba
      Erithacus rubecula - Petirrojo 'cantarín'
Resoba, es un pueblecito enclavado en el valle Estrecho a tan sólo 7 kilómetros de Cervera de Pisuerga, de muy escasa población.

No así sucede en extensión, pues cuenta con los terrenos más amplios de toda la provincia, regados por cuatro ríos: el Carrión, el Pisuerga, el Morales (Resoba) y el Monderío.

Partimos de Resoba a 1.090 mts., entre bosques y montañas del valle Estrecho    
Aegithalos caudatus - Mito      

Desde la plaza de la fuente, donde aparcamos, tomamos un camino en dirección este que nos lleva al cementerio.

Bordeamos el cementerio virando hacia el norte y en 250 mts. nos encontramos con un cruce.


Podarcis muralis - Lagartija roquera

Nuestro camino sigue de frente, en dirección norte, pues vamos a ir ganando altura por el antiguo camino a Vega de Liébana, hoy en desuso.

'eSrá' disfrutando del paisaje desde el antiguo trazado a Vega de Liébana.
Al fondo peña Escrita y Santa Lucía; A la derecha asoma el Curavacas   
Dendrocopos major - Pico picapinos      

Un kilómetro y medio más arriba nos unimos a una pista que, en dirección NO, nos eleva por el paraje conocido como La Loma, entre ejemplares jóvenes de roble albar.

¡Qué agradable es descubrir la presencia de Trepador azul y de Pico picapinos!

A la izquierda llevamos la silueta de la sierra de la Peña, el gigante dormido de valle Estrecho
    Lampides boeticus - Canela estriada

No llevamos una hora de camino cuando a nuestra derecha comienza a asomar el valle de Monderío y las elevaciones monte del Obispo y monte de Los Cintos que sabemos interesantes por su diversidad y dejamos pendientes para futura ocasión.

A la izquierda tenemos ahora un espectacular mirador natural a la peña Santa Lucía.

Disfrutamos del conglomerado de valles, cortados, bosques y arroyos que caen hacia el valle del río Resoba.


Vista de la peña Santa Lucía desde el mirador natural (1.380 mts.), frente al monte de Los Cintos
      Grupo de Ciervos
Dejamos atrás el privilegiado mirador y el monte Los Cintos para seguir recorrido mediante una amplia curva a izquierda hasta llegar a la collada Bajera a 1.450 mts. donde tenemos otro mirador ¡Y qué vistas!

De frente, hacia el norte, la peña Carazo.
Al este, la sierra de Peñalabra.
Hacia el sureste el hermoso valle del arroyo Milares.

Al fondo, Peña Carazo donde subiéramos hace pocas fechas. La crónica en: PEÑA CARAZO Y HORCA DE LORES 
El valle del arroyo Milares y las sierras de Peñalabra y la Cebollera, al fondo
Ramillete de Crocus serotinus     
Las escarpadas paredes norte del monte de Milares, con su máxima elevación 'Los Cintos', son refugio de centenarios robles, bosquetes de tilos e importantes acebedas, por lo que se considera un entorno privilegiado para ciertas especies animales que tienen aquí su refugio.

Poca distancia recorremos por este buen camino y vemos asomar a las Tenadas de Resoba, presididas por su centenario roble, que asoma dentro del recinto.

El roblón de la Tenada es un magnífico ejemplar de Roble albar (Quercus petraea) de más de 500 años,15 mts. de altura y 7 de perímetro en la base
      Atlantarctia tigrina - Gitana atigrada (oruga)
Su amplia copa da cobijo a los viejos tapiales de la Tenada, convirtiéndose por ello en un árbol singular, recogido en el libro de los árboles singulares de Castilla y León.

No llega a la una del mediodía, así pues continuamos lo que nos falta por ascender para alcanzar los 1.520 mts. del collado de las Doncellas.

Desde el collado de las Doncellas disfrutamos de una bonita vista del valle de Valdecerezo que da paso a Pineda
Vamos bajando en tranquilo paseo por la pista que zigzaguea por este bonito valle del arroyo Valdecerezo.
'eSrá' en la pista que desciende al valle de Pineda, con la escultural silueta
del Espigüete de fondo
Abajo, el valle de Pineda a los pies del pico Las Lagunillas    

Escasa media hora nos lleva este trayecto y pronto nos vemos disfrutando de las estribaciones del pico Las Lagunillas y las frescas aguas del joven río Carrión.

El río Carrión nace en Fuentes Carrionas, laguna enclavada en un circo glaciar, aguas arriba por el valle de Pineda
      Emberiza cia - Escribano montesino
Avanzamos junto al Carrión aguas abajo, hacia el pueblo de Vidrieros, hasta llegar a puente Pucherín, donde paramos a comer.

El rumor de las aguas, el canto de mirlos, currucas y escribanos y el bonito baile de una lavandera cascadeña junto a la orilla nos tienen distraídos durante el almuerzo.

Colias crocea - Colias común    

Es un lugar agradable y bastante frecuentado por ciclistas, paseantes y amigos de la naturaleza en general.

Tres cuartos de hora más tarde, emprendemos el regreso.

'eSrá' al comienzo del valle de Valdecerezo, por donde vamos a ascender al collado de las Doncellas
       Potro junto a su madre
Durante la bajada a Pineda desde el collado de las Doncellas nos pareció interesante reconocer el valle de Valdecerezo y, por ello, vamos a subir por él de vuelta al collado.

Atravesado un cerramiento que guarda una ganadería caballar, continuamos valle arriba disfrutando de los verdes pastos que riegan el sinuoso curso del arroyo de Valdecerezo.

Un pinar de repoblación a la derecha y arbolado de ribera a ambos lados del valle
Sauces, Cerezos, Acebos, Mostajos, Espinos, Escobas y Brezos
nos cierran el paso durante la ascensión
El arroyo de Valdecerezo tan pronto aparece como discurre subterráneo.
Sus aguas crean zonas encharcadas y turberas que preservan abundante vegetación,
aún en esta época del año
Hayas y robles vuelven a tomar preponderancia. Estamos llegando al collado de las Doncellas.
'eSrá.' llega al collado de las Doncellas, desde donde volvemos a ver
la esbelta figura del Espigüete
Cicindela maroccana - Cicindela o Escarabajo tigre      
Desde aquí el camino es bien conocido y, como la temperatura y el día acompañan, aprovechamos el paseo de vuelta hasta bien entrada la tarde.

No es difícil ver una Cicindela o Escarabajo tigre, que con sus grandes ojos busca una presa que atrapar con sus fuertes mandíbulas.


Podalonia hirsusta - Avispa excavadora
O una Avispa excavadora a la que favorece su actividad la buena temperatura de la tarde.

Quizá aún esté a tiempo de paralizar con el veneno de su aguijón a alguna larva de mariposa, para llevarla al nido excavado en la tierra donde depositará un solo huevo que, tras eclosionar, podrá alimentarse de esa larva.

Vamos encontrando todas las tonalidades del otoño
Y algún ejemplar de Ciervo que nos sorprende al salto...
Otros, nos saludan al paso...
Casi sin darnos cuenta nos vamos aproximando a Resoba, dando por finalizado el paseo de 'Los Miradores de la Palentina'.
PLANO Y PERFIL DEL RECORRIDO
El recorrido seguido está dibujado en linea azul
DISTANCIA TOTAL -> 16,50 Kms.                       ASCENSIÓN ACUMULADA -> 574 mts.
TIPO DE TRAZADO -> Lineal (ida y vuelta)                        DURACIÓN -> 7 h. 20'
DIFICULTAD -> Fácil                                        DESCARGA DEL TRACK
GRÁFICA DEL RECORRIDO
'Ojolince y Sra.'
**SED CONSCIENTES DE VUESTRAS LIMITACIONES PORQUE LA MONTAÑA PONE A CADA UNO EN SU SITIO**

Peñas Escrita y Santa Lucía desde Santibáñez de Resoba

Sábado, 7 de Marzo de 2.015

Aprovechando el día primaveral y con intención de terminar la jornada en Barruelo de Santullán, nos dirigimos al corazón del valle Estrecho en la Montaña Palentina.
Iglesia de San Cristóbal en Santibáñez de Resoba
Aparcamos junto a la iglesia de Santibáñez de Resoba, algo apartada del pueblo y con vistas inmejorables hacia la sierra de la Peña.
      Cyanistes caeruleus - Herrerillo común
Pero, no vamos a dirigir nuestros pasos a esta sierra sino a aquellas cumbres que cierran por el norte el valle Estrecho: peña Escrita y peña Santa Lucía, aún inéditas en nuestro palmarés.

Porteando raquetas a la espalda, por temor a encontrarnos buena parte de la nieve caída días atrás, atravesamos el pueblo construído en graderío.

Santibáñez de Resoba, su iglesia abajo y peña Redonda al fondo
Una vez recorrido, llegamos a la parte alta donde una fuente, con largo abrevadero, no da cabida al agua del abundante deshielo de estos días.
Fuente-abrevadero en la parte alta de Santibáñez de Resoba  
Las peñas calizas que rodean el pueblo de Santibáñez de Resoba están salpicadas de cuevas, como la del Palomar, los Moros o los Ángeles, lo que confiere a este entorno un sugerente aspecto...

...y un buen aliciente para una futura jornada por la zona.

Zoom a peña Redonda desde la parte alta de Santibáñez de Resoba


Llegados al final del pavimento, seguimos una pista bien marcada que nos va a ir conduciendo, en dirección Noroeste, al alto de la Cañada.


Dejamos el pueblo asentado en el hondo del valle Estrecho, bien repaldado por la sierra de la Peña
      Saxicola rubicola - Tarabilla europea ♂
Desestimamos el primer desvío que sale a nuestra izquierda, pues nos llevaría directos a la valleja de peña Lugar.

Tras éste, del resto de los cruces que van a ir apareciendo, siempre deberemos elegir el camino que sale por la izquierda.

'eSrá' y el abrevadero junto al arroyo de Rialiendres, con vistas a la sierra de Peña Labra
Zoom a la sierra de Peña Labra     



Hemos partido de los 1.200 mts. de altitud en que se encuentra Santibáñez de Resoba y esta pista, ahora nevada, no da tregua...


... Ya estamos a 1.400 mts.




Zoom al pico Valdecebollas     


Eso sí, las vistas comienzan a merecer mucho la pena.

Hacia el Noreste, la sierra de peña Labra y el pico Valdecebollas, cubiertos por el blanco manto.


Pyrrhocorax pyrrhocorax - Chova piquirroja
Carboneros, herrerillos y pinzones hemos visto en el pueblo pero son ahora las tarabillas, los escribanos montesino y cerillo y el bisbita alpino los que acompañan a 'Ojolince y Sra.' en nuestra lenta progresión.

Llegando al alto de la Cañada, nos recibe un ruidoso bando de Chova piquirroja.

Collado del Alto de la Cañada a 1.500 mts. con refugio y aprisco para ganado
Abandonamos la pista que se dirige a los puertos de Oñañejo,
para ascender las peñas que cierran el valle por el sur
Saludamos a un lugareño del que habíamos observado sus huellas en la nieve y viene de vuelta.

Nos advierte que la subida al Santa Lucía por los puertos de Oñañejo está helada.

'Ojolince y Sra.' llevamos idea de hacer por ahí nuestro regreso.

Observamos los primeros ejemplares de ciervo del día   
Desde este collado, tomamos dirección sur, remontando la ladera que cierra el valle del arroyo de la Cañada.

Sobrevolando peña Lugar y ahora la peña que vamos subiendo (a la que no podemos poner nombre) tenemos en buen número, al magestuoso Buitre leonado.

Vista del collado del Alto de la Cañada y los meandros del arroyo del mismo nombre, que hemos dejado bien abajo
Otros protagonistas de cuatro patas van delante de nosotros...
Ejemplar ♂ Cervus elaphus, ¡a una cuerna!     

Después de una serpenteante subida por la empinada loma entre piedras, juníperus y nieve, tomamos una senda a media ladera donde los ciervos han abierto buena huella.

Salimos a un pequeño collado, antesala de la subida a nuestra peña 'sin nombre'.

Asoma el Curavacas. Primera vista del día

Desde este collado continuamos en dirección sur para enfilar la subida a la Peña 'sin nombre' por su ladera norte.

Carente de nieve, en pocos minutos estamos junto al mojón que tiene en su vértice, a 1.715 mts. y...

¡¡Menudas vistas!!


      'eSrá' en Peña 'sin nombre' con vistas al Curavacas 

Éste debe ser un lugar muy frecuentado por los cérvidos pues, junto al mojón, nos encontramos los restos de una gran alpaca.

Suponemos que se trata de la ayuda alimentaria que soltaron desde el aire, durante las fechas de la gran nevada el pasado mes de Febrero.
Ya se ve el pico Peña Labra, que da nombre a la sierra   
Conseguimos ver la sierra de Peña Labra al completo; el valle de Pineda y las peñas Carazo y Horca de Lores; el Curavacas y sus cumbres aledañas, Curruquilla y Hoya Contina.

Peña Escrita la tenemos enfrente... Pero ¿dónde está la peña Santa Lucía?


'eSrá' y el Curavacas. Muy fotografiados en el día de hoy
Descendemos de la peña 'sin nombre' por su ladera sur que, curiosamente, conserva un buen manto nevado.
'Ojolince' enfila la bajada de la peña 'sin nombre'    

Para ganar el collado que tenemos justo enfrente y que no es otro que el collado de peña Escrita.

Tras la gran loma que observamos al oeste debe alzarse el Santa Lucía, que aún no vemos.

En dirección este, vamos superando lomas hacia peña Escrita

Ganada la cuerda, tomamos dirección este y vamos recorriendo una sucesión de peñas que conforman el perfil de peña Escrita.

Alcanzada la tercera, por su altitud, comprendemos que hemos hecho cumbre en peña Escrita.

'Ojolince y Sra.' en peña Escrita. De fondo la gran loma que oculta el Santa Lucía.
Hacemos un merecido descanso en la cumbre de peña Escrita a 1.764 mts.
      Gyps fulvus - Buitre leonado


Es la mejor forma de ver quién vive o viaja a esta altitud...

Varios son los Buitres leonados que ciclean sobre nuestras cabezas.

Aviones roqueros se distinguen volando junto a los cortados de la peña.



      Corvus corax - Cuervo

Se aproxima una pareja de Cuervos emitiendo su sonoro graznido al pasar.

¡Por fin! Tras la gran loma, conseguimos distinguir las antenas que hacen reconocible al Santa Lucía.

'Ojolince' de vuelta al collado de peña Escrita
De vuelta al collado de peña Escrita, avanzamos por él hacia el oeste. Hace poco que ha desaparecido la nieve que lo cubría y la vegetación es escasa, pero... algún rastro de vida encontramos.
Surcos dejados por el topillo nival bajo la nieve,
que han quedado al descubierto
Los topillos nivales son capaces de moverse bajo la nieve para recolectar vegetación, semillas y frutos olvidados, evitando así el peligro que supone ir por encima y ser fácilmente descubiertos por los depredadores.

Peleteria meridionalis, mosca robusta de color brillante parásita de orugas de mariposas y larvas de coleópteros

Cuando la nieve se va, quedan las pequeñas conducciones superficiales y túneles de tierra que les han servido para comunicar madrigueras y despalzarse.

Como el sol está calentando bien a esta hora, también localizamos algún díptero que se aprovecha de ello.

 Atrás dejamos la peña Escrita y sus lomas recorridas
A la vista, la cima del peña Santa Lucía y el embalse de Camporredondo

Seguimos sumando metros y altura a este recorrido por la cuerda, en dirección noroeste.

Ganada la loma previa, ya tenemos a la vista la cima del peña Santa Lucía

'Ojolince' se detiene...

'Ojolince' y la sierra de la Peña
... ¿Quién viene ahora?
'eSrá y el Curavacas ¡Otra vez!     
      Luciendo las camisetas obsequio de Comunidad SSUMMON
'Ojolince y Sra.' en peña Santa Lucía a 1.854 mts.,

Al fin, dejamos de hacer parones y llegamos a peña Santa Lucía.

El día se está portando y hace buena temperatura en la cima para comer.

Mientras... todo esto es lo que está ante nosotros
¡Disfrutémoslo, es gratis!

Espigüete y pico Murcia     
 De izda a dcha. Hoya Contina, Curruquilla y Curavacas
Zoom a la Sierra de Peña Labra. Os presentamos 'el Peñalabra'
De la misma sierra. Éste es el nombrado pico Tres Mares
Nos asomamos a la vertiente sur, y se distingue la senda que viene del mirador del Alto de la Varga.
'Ojolince' encara la bajada al 'Ojo de la Lastra'     

¡Nos pica la curiosidad!

¿No tardaremos mucho en bajar a conocer el afamado 'Ojo de la Lastra'?

¡Allá que nos vamos!

En menos de veinte minutos estamos contemplando singular figura.

El 'Ojo de la Lastra'  parcialmente tapado por la acumulación de nieve
Zoom al mirador del Alto de la Varga   


A través de él se distingue el mirador y zona de aparcamiento del Alto de la Varga, desde donde parte la ruta de acceso más cómoda al Santa Lucía.

Tras hacerle una buena serie de fotos, desandamos lo bajado para volver a la cima del Santa Lucía.

Espectaculares las vistas del Curavacas que ahora, durante la ascensión, llevamos siempre de frente.


Curavacas desde la ascensión al peña Santa Lucía por su ladera sur
'eSrá' en los últimos metros para hacer cumbre por segunda vez

Esta vez, no nos detenemos en la cumbre más que el tiempo en que obsevamos a un Cernícalo vulgar hacer un picado sobre un Topillo nival.

Éste ha estado hábil, se ha librado 'por los pelos' de convertirse en el almuerzo de la rapaz.

'Ojolince' toma la pista hacia los puertos de Oñañejo

Bajamos unos cuantos metros por la senda de grandes hitos por la que llegamos esta mañana, hasta que ésta entronca con la pista que viene de los puertos de Oñañejo.

Vamos empleando la ancha pista para el descenso, en los tramos en los que está limpia de nieve.

Pero, se abre ante nosotros otra posibilidad...

Hacemos el descenso al collado de los puertos de Oñañejo por la amplia vaguada, con vistas a la sierra de Peñalabra
Este es el momento en que podemos dejar de portear la raquetas, para facilitarnos el descenso de los 1.700 mts. en que dejamos la pista hasta los 1.590 mts. en que se encuentra la majada de Oñañejo, pisando sobre una gruesa capa de nieve que ha acumulado esta vaguada.
Un vistazo atrás nos muestra la vaguada que estamos descendiendo
'Ojolince' se aproxima a la majada de Oñanejo que tiene buena cabaña y fuente de piedra, con un agua excelente ¡damos fe!
Numerosos ojos nos observan...       

Un buen grupo de hembras de Ciervo, vigila nuestra progresión desde una cota alta.

'eSrá' baja algo más despacio, pero pronto 'Ojolince y Sra.' se reúnen para hacer un descanso en la cabaña de Oñañejo.

'eSrá' completando el descenso al collado de los puertos de Oñañejo
Buena capa de nieve la que ha caído en estas montañas

Tras el buen descanso, y ya sin raquetas, seguimos el curso del arroyo de La Cañada que nos guía hacia la pista que abandonamos al comienzo del descenso del Santa Lucía.

Ahora es un grupo de machos de Ciervo, el que se percata de nuestra presencia

Cervus elaphus - Ciervo rojo
Y, en breves instantes... ¡¡sale por patas!!
'eSrá' cruza de un salto el arroyo,
junto a la fuente de la Cañada  


Caminando con mayor comodidad por un terreno de menor pendiente, seguimos el descenso, paralelos al arroyo de la Cañada.

En poco tiempo llegamos a la fuente de la Cañada.

Esta mañana no llegamos a verla pues comenzamos a remontar ladera arriba, nada más alcanzar el collado del alto de la Cañada.

Discurrimos ahora por el tramo de meandros que ha formado el arroyo y que tan claramente distinguiéramos desde lo alto esta mañana.


El arroyo de la Cañada no puede encauzar toda el agua de deshielo y forma bonitas lagunas, que hay que ir sorteando
Antes de tomar la pista de vuelta al pueblo, echamos la última mirada a estos parajes.
Vaguada a los puertos de Oñañejo por la que hemos descendido del Santa Lucía
Aglais urticae - Ortiguera     
Desde el collado del alto de la Cañada nos conocemos bien el retorno a Santibáñez de Resoba.

Y siempre hay tiempo para sacar alguna que otra curiosidad que nos encontramos en el camino, como esta bonita 'Ortiguera' agradeciendo los últimos rayos de sol.

Así nos reciben, el pueblo y
la sierra de la Peña
Y así, su iglesia y la peña Redonda
Certhia brachydactyla - Agateador común
en un chopo del pueblo
A eso de las seis y cuarto completamos el recorrido y ponemos rumbo a Barruelo de Santullán.

El Club de Montaña La Escalerilla de Barruelo hoy hace entrega de los premios del X Certamen Fotográfico 'Otoño en la Montaña Palentina', dentro de las actividades de la IX Semana de la Montaña.

'Ojolince' ha sido galardonado con el segundo premio y quiere acudir a recogerlo.

PLANO Y PERFIL DEL RECORRIDO

DISTANCIA TOTAL -> 11,77 Kms.
ASCENSIÓN ACUMULADA -> 836 mts.
TIPO DE TRAZADO -> Parcialmente circular
DIFICULTAD -> Media-Baja
TIEMPO TOTAL -> 8 h. 15'


        El recorrido seguido está dibujado en linea verde
GRÁFICA DEL RECORRIDO
Esperamos que hayáis disfrutado con el paseo y os emplazamos para el siguiente.
Ojolince y Sra.
**SED CONSCIENTES DE VUESTRAS LIMITACIONES PORQUE LA MONTAÑA PONE A CADA UNO EN SU SITIO**