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Las cascadas del Purgatorio y el Aguilón (valle de El Paular)

Miércoles, 7 de Marzo de 2.018
Hemos puesto rumbo al Parque Nacional de la sierra de Guadarrama con intención de disfrutar de su magnífico paisaje tras las recientes nevadas.
Real Monasterio de Santa María de 'El Paular' y el Peñalara al fondo
      Periparus ather - Carbonero garrapinos, en los chopos de ribera

Aún siendo día laborable, los puertos de Navacerrada y Cotos en estas fechas están bien concurridos... tanto, que no encontramos ni un solo aparcamiento libre.

En consecuencia, decidimos poner rumbo a Rascafría e ir a comprobar cómo baja el arroyo Aguilón en el entorno de las cascadas del Purgatorio.


Puente del Perdón del S. XVIII y Monasterio de 'El Paular'
respaldado por los montes Carpetanos    
Fringilla coelebs - Pinzón vulgar ♀    
Pasamos por el centro de visitantes 'Valle de El Paular' antes de emprender camino, y comenzamos ruta atravesando el río Lozoya sobre el afamado Puente del Perdón.

'Al Puente del Perdón su nombre le viene de antaño, cuando en este aislado valle se dictaba justicia en el mismo puente'.

Rio Lozoya desde el puente del Perdón,
tramo conocido como presa del Pradillo    

'Si el condenado pedía clemencia y era perdonado, volvía sano y salvo cruzando el puente...

... pero si no, los alguaciles le conducían a la Casa de la Horca, situada en las inmediaciones del Puerto de Cotos, donde era ejecutado'.



La carretera del puente conduce al área recreativa de 'Las Presillas'.
Área recreativa de 'Las Presillas' y Macizo de Peñalara
      Sitta europaea - Trepador azul

Avanzamos por un camino paralelo a la carretera, dejando a nuestra derecha a 'Las Presillas'.

Unas piscinas naturales que forma el río Lozoya, y que han sido acondicionadas como área de esparcimiento.

Nos introducimos en un joven robledal.


Avanzamos por el GR-10, coincidente en este tramo con nuestro sendero RV 6.2
Dendrocopos major - Pico picapinos,
tamborileando sobre uno de los robles      
Inicialmente, nuestro sendero coincide con el GR-10 que discurre por la Cuerda Larga de Guadarrama, desde el puerto de la Morcuera al puerto de Navacerrada.

Llevaremos unos dos kilómetros andados siguiendo las marcas del GR, cuando tenemos nuestro primer encuentro con el arroyo Aguilón.

'eSrá' junto a las alegres aguas del arroyo Aguilón
      Lycaena phlaeas - Manto bicolor ♂
de temprana aparición en su primera generación

Una breve parada junto al arroyo Aguilón y vemos, aguas arriba, un raudo Mirlo acuático.

Fugaz visión que a 'Ojolince' no da tiempo a plasmar para compartir en este relato.


Crocus carpetanus - Azafrán serrano, en sus varidades malva y blanca


Progresamos por el robledal para encontrarnos un kilómetro y medio más adelante con una bifurcación del camino.

Una señal de color azul nos indica que debemos abandonar el GR y tomar la pista que sale a la izquierda, dirección este.

A media ladera del monte 'La Umbría', se abre una bonita vista de la sierra y el pueblo de Rascafría
    Aegypius monachus - Buitre negro
En Guadarrama se asienta una de sus mayores colonias

Poco a poco, vamos ganando altura por el monte 'La Umbría' y comenzamos a ver algunas manchas de nieve.

Faldeando este joven robledal de melojos llegamos a los 1.300 mts. de altitud, lo que va a ser la mayor cota que alcancemos hoy.

'eSrá' en agradable subida por el soleado monte 'La Umbría'    
La pista comienza a descender para toparse, de nuevo, con el arroyo Aguilón, en las inmediaciones de unas tenadas de ganado.
Un puente de madera nos permite atravesar el crecido Aguilón a 1.260 mts. de altitud
'Ojolince' avanza por la senda RV 6.2 a las cascadas      
Atravesamos el arroyo por un puente de madera de buenas dimensiones y giramos a nuestra derecha para tomar el sendero a las cascadas, señalizado como RV 6.2

Umbilicus rupestris - Ombligo de venus, de carnosas y brillantes hojas capaces de almacenar agua y crecer al abrigo de rocas y muros, incluso en los meses más fríos

Nuestro camino, ahora convertido en senda, discurre paralelo al arroyo.

En su primer tramo está flanqueado a la derecha por el caudaloso Aguilón y, a la izquierda por unas tapias de piedra que delimitan la finca de 'El Canchal'.

'eSrá' sobre una de las pasarelas de la senda a las cascadas    
Transitamos ahora bajo la cobertura de un buen pinar de 'Silvestres'; alguno que otro ha sucumbido a los duros temporales de este invierno.

La senda se sigue sin dificultad pues está señalizada y acondicionada con pasarelas que permanecen heladas bien entrado el mediodía.

El arroyo del Aguilón o de Navahondilla nos ofrece todo un espectáculo
      Apetece sentarse junto a cualquiera de los saltos del Aguilón

La cantidad de agua, la fuerza con la que baja y el ensordecedor rumor del Aguilón hace que resulte muy atractivo este recorrido que, poco a poco, se va encajonando en las proximidades del paraje conocido como las cascadas del Purgatorio.



El Aguilón se encajona en un paraje de gran belleza
El enclave se vuelve más escarpado y abrupto en las inmediaciones del Purgatorio
La senda se convierte en trocha y, tras un paso angosto se encuentra el balcón con plataforma desde donde podemos admirar esta primera cascada del Purgatorio.
Primera de las cascadas del Purgatorio a 1.370 mts.
'Ojolince y Sra.' en el mirador de la cascada baja del Purgatorio
El Azafrán serrano es de temprana floración,
incluso cuando la nieve aún no se ha fundido

Una segunda cascada se precipita unos metros más arriba de la primera.

Para llegar a ella hay una pequeña trepada cuyo paso se encuentra helado y decidimos dejar su visita para mejor ocasión.

El arroyo Aguilón o de Navahondilla, así como otros manantiales de esta sierra, nace en las estribaciones del puerto de la Morcuera, ruta que aún tenemos pendiente 'Ojolince y Sra.'

En un soleado recodo, junto al sonoro arroyo, hacemos nuestro almuerzo.

Media hora más tarde, retornamos al Monasterio por el mismo sendero, disfrutando de los recovecos y rincones que nos ofrece este valle.

Saltos del arroyo Aguilón
'Ojolince' junto a uno de los 'Silvestres' caídos
'eSrá', La Bioaventurera equilibrista
Al atardecer, las nubes van cubriendo los montes Carpetanos
PLANO Y PERFIL DEL RECORRIDO
El recorrido seguido está dibujado en linea azul
DISTANCIA TOTAL -> 13,11 kms.      TIPO DE TRAZADO -> Lineal
TIEMPO TOTAL -> 5 h. 20'      ASCENSIÓN ACUMULADA -> 265 mts.
DIFICULTAD -> Baja      DESCARGA DEL TRACK
GRÁFICA DEL RECORRIDO
      'Ojolince y Sra.'
**SED CONSCIENTES DE VUESTRAS LIMITACIONES PORQUE LA MONTAÑA PONE A CADA UNO EN SU SITIO**

Miradores de la Palentina. De Resoba a puente Pucherín

Domingo, 22 de Octubre de 2017
Como nos gusta el otoño en la Montaña Palentina, vamos a disfrutar de sus bosques y miradores por el camino a Vega de Liébana que une el valle Estrecho desde Resoba, con el valle de Pineda en puente Pucherín.
Ojolince y Sra.' junto al roble centenario de las Tenadas de Resoba
      Erithacus rubecula - Petirrojo 'cantarín'
Resoba, es un pueblecito enclavado en el valle Estrecho a tan sólo 7 kilómetros de Cervera de Pisuerga, de muy escasa población.

No así sucede en extensión, pues cuenta con los terrenos más amplios de toda la provincia, regados por cuatro ríos: el Carrión, el Pisuerga, el Morales (Resoba) y el Monderío.

Partimos de Resoba a 1.090 mts., entre bosques y montañas del valle Estrecho    
Aegithalos caudatus - Mito      

Desde la plaza de la fuente, donde aparcamos, tomamos un camino en dirección este que nos lleva al cementerio.

Bordeamos el cementerio virando hacia el norte y en 250 mts. nos encontramos con un cruce.


Podarcis muralis - Lagartija roquera

Nuestro camino sigue de frente, en dirección norte, pues vamos a ir ganando altura por el antiguo camino a Vega de Liébana, hoy en desuso.

'eSrá' disfrutando del paisaje desde el antiguo trazado a Vega de Liébana.
Al fondo peña Escrita y Santa Lucía; A la derecha asoma el Curavacas   
Dendrocopos major - Pico picapinos      

Un kilómetro y medio más arriba nos unimos a una pista que, en dirección NO, nos eleva por el paraje conocido como La Loma, entre ejemplares jóvenes de roble albar.

¡Qué agradable es descubrir la presencia de Trepador azul y de Pico picapinos!

A la izquierda llevamos la silueta de la sierra de la Peña, el gigante dormido de valle Estrecho
    Lampides boeticus - Canela estriada

No llevamos una hora de camino cuando a nuestra derecha comienza a asomar el valle de Monderío y las elevaciones monte del Obispo y monte de Los Cintos que sabemos interesantes por su diversidad y dejamos pendientes para futura ocasión.

A la izquierda tenemos ahora un espectacular mirador natural a la peña Santa Lucía.

Disfrutamos del conglomerado de valles, cortados, bosques y arroyos que caen hacia el valle del río Resoba.


Vista de la peña Santa Lucía desde el mirador natural (1.380 mts.), frente al monte de Los Cintos
      Grupo de Ciervos
Dejamos atrás el privilegiado mirador y el monte Los Cintos para seguir recorrido mediante una amplia curva a izquierda hasta llegar a la collada Bajera a 1.450 mts. donde tenemos otro mirador ¡Y qué vistas!

De frente, hacia el norte, la peña Carazo.
Al este, la sierra de Peñalabra.
Hacia el sureste el hermoso valle del arroyo Milares.

Al fondo, Peña Carazo donde subiéramos hace pocas fechas. La crónica en: PEÑA CARAZO Y HORCA DE LORES 
El valle del arroyo Milares y las sierras de Peñalabra y la Cebollera, al fondo
Ramillete de Crocus serotinus     
Las escarpadas paredes norte del monte de Milares, con su máxima elevación 'Los Cintos', son refugio de centenarios robles, bosquetes de tilos e importantes acebedas, por lo que se considera un entorno privilegiado para ciertas especies animales que tienen aquí su refugio.

Poca distancia recorremos por este buen camino y vemos asomar a las Tenadas de Resoba, presididas por su centenario roble, que asoma dentro del recinto.

El roblón de la Tenada es un magnífico ejemplar de Roble albar (Quercus petraea) de más de 500 años,15 mts. de altura y 7 de perímetro en la base
      Atlantarctia tigrina - Gitana atigrada (oruga)
Su amplia copa da cobijo a los viejos tapiales de la Tenada, convirtiéndose por ello en un árbol singular, recogido en el libro de los árboles singulares de Castilla y León.

No llega a la una del mediodía, así pues continuamos lo que nos falta por ascender para alcanzar los 1.520 mts. del collado de las Doncellas.

Desde el collado de las Doncellas disfrutamos de una bonita vista del valle de Valdecerezo que da paso a Pineda
Vamos bajando en tranquilo paseo por la pista que zigzaguea por este bonito valle del arroyo Valdecerezo.
'eSrá' en la pista que desciende al valle de Pineda, con la escultural silueta
del Espigüete de fondo
Abajo, el valle de Pineda a los pies del pico Las Lagunillas    

Escasa media hora nos lleva este trayecto y pronto nos vemos disfrutando de las estribaciones del pico Las Lagunillas y las frescas aguas del joven río Carrión.

El río Carrión nace en Fuentes Carrionas, laguna enclavada en un circo glaciar, aguas arriba por el valle de Pineda
      Emberiza cia - Escribano montesino
Avanzamos junto al Carrión aguas abajo, hacia el pueblo de Vidrieros, hasta llegar a puente Pucherín, donde paramos a comer.

El rumor de las aguas, el canto de mirlos, currucas y escribanos y el bonito baile de una lavandera cascadeña junto a la orilla nos tienen distraídos durante el almuerzo.

Colias crocea - Colias común    

Es un lugar agradable y bastante frecuentado por ciclistas, paseantes y amigos de la naturaleza en general.

Tres cuartos de hora más tarde, emprendemos el regreso.

'eSrá' al comienzo del valle de Valdecerezo, por donde vamos a ascender al collado de las Doncellas
       Potro junto a su madre
Durante la bajada a Pineda desde el collado de las Doncellas nos pareció interesante reconocer el valle de Valdecerezo y, por ello, vamos a subir por él de vuelta al collado.

Atravesado un cerramiento que guarda una ganadería caballar, continuamos valle arriba disfrutando de los verdes pastos que riegan el sinuoso curso del arroyo de Valdecerezo.

Un pinar de repoblación a la derecha y arbolado de ribera a ambos lados del valle
Sauces, Cerezos, Acebos, Mostajos, Espinos, Escobas y Brezos
nos cierran el paso durante la ascensión
El arroyo de Valdecerezo tan pronto aparece como discurre subterráneo.
Sus aguas crean zonas encharcadas y turberas que preservan abundante vegetación,
aún en esta época del año
Hayas y robles vuelven a tomar preponderancia. Estamos llegando al collado de las Doncellas.
'eSrá.' llega al collado de las Doncellas, desde donde volvemos a ver
la esbelta figura del Espigüete
Cicindela maroccana - Cicindela o Escarabajo tigre      
Desde aquí el camino es bien conocido y, como la temperatura y el día acompañan, aprovechamos el paseo de vuelta hasta bien entrada la tarde.

No es difícil ver una Cicindela o Escarabajo tigre, que con sus grandes ojos busca una presa que atrapar con sus fuertes mandíbulas.


Podalonia hirsusta - Avispa excavadora
O una Avispa excavadora a la que favorece su actividad la buena temperatura de la tarde.

Quizá aún esté a tiempo de paralizar con el veneno de su aguijón a alguna larva de mariposa, para llevarla al nido excavado en la tierra donde depositará un solo huevo que, tras eclosionar, podrá alimentarse de esa larva.

Vamos encontrando todas las tonalidades del otoño
Y algún ejemplar de Ciervo que nos sorprende al salto...
Otros, nos saludan al paso...
Casi sin darnos cuenta nos vamos aproximando a Resoba, dando por finalizado el paseo de 'Los Miradores de la Palentina'.
PLANO Y PERFIL DEL RECORRIDO
El recorrido seguido está dibujado en linea azul
DISTANCIA TOTAL -> 16,50 Kms.                       ASCENSIÓN ACUMULADA -> 574 mts.
TIPO DE TRAZADO -> Lineal (ida y vuelta)                        DURACIÓN -> 7 h. 20'
DIFICULTAD -> Fácil                                        DESCARGA DEL TRACK
GRÁFICA DEL RECORRIDO
'Ojolince y Sra.'
**SED CONSCIENTES DE VUESTRAS LIMITACIONES PORQUE LA MONTAÑA PONE A CADA UNO EN SU SITIO**