Domingo, 2 de Abril de 2017
No nos supone ningún esfuerzo visitar tierras leonesas cuando Javier 'javivalladares.com' nos prepara ruta y además nos brinda su compañía.
Peña Portilla desde la bajada de la Peña de los Machos
Nos dirigimos a Piedrasecha, pueblecito rural en las estribaciones de la Cordillera Cantábrica conocido por el desfiladero de Los Calderones, que hoy deberemos dejar para otra ocasión.
Ranunculus ficaria - Celidonia menor,
de pétalos y hojas brillantes acorazonadas
Únicamente disponemos de la mañana para subir a Peña Portilla ya que hemos quedado para comer. Así pues, nos ponemos a ello.
Atravesamos Piedrasecha hacia su parte alta, tomando un camino que, con dirección oeste, desemboca en el valle de Villar; vega que separa los pueblos de Piedrasecha y Portilla de Lunada.
Así ganamos altura hasta alcanzar el primer claro del bosque conocido como 'El Chano'.
Malacosoma castrensis - Nido de Orugas
Atravesamos El Chano y nos internamos en el robledal para seguir ganando altura.
Los robles han comenzado a entreabrir sus yemas tratando de imitar a Primulas, Erythronium, Helleborus y demás flora primaveral que vamos disfrutando a nuestro paso.
Enseguida llegamos al Chano superior.
Una pradería de altura en la que se dejan ver Cincoenramas, Cariofiladas de montaña, Romuleas y una bonita 'Piquitos castaña', alimentándose al sol de la mañana.
Carcharodus alceae - Piquitos castaña, hespérido de bonito diseño ajedrezado
Desde el Chano superior el ascenso se vuelve más pronunciado.
Una lengua de terreno abierto y pedregoso, en la que encontramos algunos hitos, nos permite realizar la subida.
Únicamente debemos ir a en busca de la linea cimera.
Un tapiz de Enebro rastrero y Uva de oso o Gayuba cubre la piedra caliza de estas montañas, altamente fragmentada.
Escobas, brezos, espinos y alguna sabina cobran vida en esta pedregosa ladera.
Ya estamos cerca de la linea cimera, en las inmediaciones de la peña El Palo.
...Y un pasadizo secreto que nos ahorra alguna que otra complicación
Aethionema saxatile - Zurrón de pastor de roca
Entre las grietas rocosas crece la bonita crucífera de flores blancas o rosadas que hay quien le llama 'Pedregosa' aunque por aquí se le conoce como 'Zurrón de pastor de Roca'.
Seguimos alguna traza de senda que pronto nos va a situar en la peña de los Machos.
Javier y 'eSrá' posando en la peña de los Machos con peña Portilla al fondo
Entre las fisuras de los crestones y pastos ralos por donde nos movemos aparece la crucífera endémica del norte y centro de la Península Ibérica.
Los pequeños racimos de flores blancas de la Draba dedeana a falta de las nieves que deberían aún cubrir en estas montañas, recrean nuestra vista.
Grandes lascas de roca fracturada y restos de trincheras y muros forman la cumbre de peña Portilla, presidida por un gran hito
En pocos minutos nos situamos en la cima a 1.834 mts. donde se encuentra un gran hito de piedras, junto al que nos hacemos la única foto de grupo de esta ruta.
Peña Portilla viene en los mapas como el alto de las Viesca y en su cima, como en la peña de los Machos, hay numerosos restos de muros de trincheras y pasillos; pero estas construcciones están en peor estado de conservación.
Peña Portilla y sus restos del antiguo fortín defensivo
Resultaría muy acertado completar esta ruta retornado a Piedrasecha por el desfiladero de Los Calderones, cerrando así una bonita y entretenida ruta circular.
Como no disponemos de tiempo, vamos a volver a Piedrasecha por donde hemos subido, que es el camino más corto.
Bajamos del cordal más 'a derecho' deteniéndonos brevemente, cuando algún protagonista solicita nuestra atención.
Y, de nuevo, nos introducimos al robledal donde tenemos un fortuito encuentro.
De rostro plano, sin protuberancia (escama rostral) y escamas labiales bien pigmentadas, la pequeña víbora de entre 45 a 50 cms., se distingue bien de las otras dos especies que existen en la península: la áspid Vipera aspis y la hocicuda Vipera latastei.
A la salida del pueblo ya se ve un resalte de peña Portilla
de pétalos y hojas brillantes acorazonadas
Únicamente disponemos de la mañana para subir a Peña Portilla ya que hemos quedado para comer. Así pues, nos ponemos a ello.
Atravesamos Piedrasecha hacia su parte alta, tomando un camino que, con dirección oeste, desemboca en el valle de Villar; vega que separa los pueblos de Piedrasecha y Portilla de Lunada.
Un extenso robledal aún sin hoja, cubre la falda de Peña Portilla
Potentilla reptans - Cincoenrama
A poco más de un kilómetro abandonamos el buen camino para introducirnos al robledal por una trocha bastante deteriorada, con profundos surcos y barro.Así ganamos altura hasta alcanzar el primer claro del bosque conocido como 'El Chano'.
Pradería 'El Chano' a 1.510 mts.,
al fondo las cresterías de la Peña El PaloMalacosoma castrensis - Nido de Orugas
Atravesamos El Chano y nos internamos en el robledal para seguir ganando altura.
Los robles han comenzado a entreabrir sus yemas tratando de imitar a Primulas, Erythronium, Helleborus y demás flora primaveral que vamos disfrutando a nuestro paso.
Los robles comienzan a echar la hoja, mostrándose querquescentes los ejemplares más jóvenes
A 'Ojolince' parece que se le ha perdido algo en El Chano superior
Enseguida llegamos al Chano superior.
Una pradería de altura en la que se dejan ver Cincoenramas, Cariofiladas de montaña, Romuleas y una bonita 'Piquitos castaña', alimentándose al sol de la mañana.
Carcharodus alceae - Piquitos castaña, hespérido de bonito diseño ajedrezado
Desde el Chano superior el ascenso se vuelve más pronunciado.
Una lengua de terreno abierto y pedregoso, en la que encontramos algunos hitos, nos permite realizar la subida.
Únicamente debemos ir a en busca de la linea cimera.
El robledal por el que hemos ascendido, el valle de Villar y el embalse de Selga de Ordás
Hacia el NO, la montaña de Babia, Omaña y Somiedo con sus cumbres aún nevadas
Lentos pero seguros, avanzamos entre rocas y juníperus Un tapiz de Enebro rastrero y Uva de oso o Gayuba cubre la piedra caliza de estas montañas, altamente fragmentada.
Un pequeño desmonte que se salva con una sencilla trepada...
Escobas, brezos, espinos y alguna sabina cobran vida en esta pedregosa ladera.
Ya estamos cerca de la linea cimera, en las inmediaciones de la peña El Palo.
...Y un pasadizo secreto que nos ahorra alguna que otra complicación
Aún nos queda alguna pedrera de grandes rocas por superar
Hemos alcanzado los 1.700 mts., y a esta altitud, son extensas las machas de almohadillado piornal.Aethionema saxatile - Zurrón de pastor de roca
Entre las grietas rocosas crece la bonita crucífera de flores blancas o rosadas que hay quien le llama 'Pedregosa' aunque por aquí se le conoce como 'Zurrón de pastor de Roca'.
Seguimos alguna traza de senda que pronto nos va a situar en la peña de los Machos.
Javier en la Peña de los Machos o alto de las Trincheras, a 1.807 mts.
Esta antecima de peña Portilla está ocupada por un fortín construido en tiempos de la guerra civil.
Se conserva en buen estado y se puede recorrer su galería de pasillos, de un puesto de tirador a otro.
Javier y 'eSrá' posando en la peña de los Machos con peña Portilla al fondo
Sin perder mucha altura, seguimos por el cordal que nos lleva a la cumbre de peña Portilla.
Trinchera con dos puestos de tirador en el collado que separa ambas peñas
Draba dedeana
Entre las fisuras de los crestones y pastos ralos por donde nos movemos aparece la crucífera endémica del norte y centro de la Península Ibérica.
Los pequeños racimos de flores blancas de la Draba dedeana a falta de las nieves que deberían aún cubrir en estas montañas, recrean nuestra vista.
Grandes lascas de roca fracturada y restos de trincheras y muros forman la cumbre de peña Portilla, presidida por un gran hito
Javier y 'Ojolince y Sra.' en peña Portilla
con vista al desfiladero de Los Calderones
Peña Portilla viene en los mapas como el alto de las Viesca y en su cima, como en la peña de los Machos, hay numerosos restos de muros de trincheras y pasillos; pero estas construcciones están en peor estado de conservación.
Peña Portilla y sus restos del antiguo fortín defensivo
Resultaría muy acertado completar esta ruta retornado a Piedrasecha por el desfiladero de Los Calderones, cerrando así una bonita y entretenida ruta circular.
Javier y 'Ojolince' disfrutan de las vistas a la bajada de la peña de Los Machos
Geum montanum - Cariofilada de montañaComo no disponemos de tiempo, vamos a volver a Piedrasecha por donde hemos subido, que es el camino más corto.
Bajamos del cordal más 'a derecho' deteniéndonos brevemente, cuando algún protagonista solicita nuestra atención.
Y, de nuevo, nos introducimos al robledal donde tenemos un fortuito encuentro.
'El Robledal a nuestros pies'
Romulea sp.
De rostro plano, sin protuberancia (escama rostral) y escamas labiales bien pigmentadas, la pequeña víbora de entre 45 a 50 cms., se distingue bien de las otras dos especies que existen en la península: la áspid Vipera aspis y la hocicuda Vipera latastei.
Vipera seoanei ssp. seoanei
Víbora de Seoane
Corydalis cava
Fumaria bulbosa o Aristoloquia hueca
Atenta y temerosa de nuestros movimientos, nos permitió hacerle algunas fotos antes de continuar su camino.
Debemos aprender a ser respetuosos con ellos.
Son un miembro más de nuestro planeta.
Un cómodo y agradable paseo de vuelta y llegamos a la hora prevista a Piedrasecha.
Javier y 'Ojolince' por la vega de Villar,
de vuelta a Piedrasecha
PLANO Y PERFIL DEL RECORRIDO
El recorrido seguido está dibujado en linea roja
DISTANCIA TOTAL -> 10 Kms. TIEMPO TOTAL -> 5 h.
TIPO DE TRAZADO -> Lineal (ida y vuelta) DIFICULTAD -> Baja
'Ojolince y Sra.'
**SED CONSCIENTES DE VUESTRAS LIMITACIONES PORQUE LA MONTAÑA PONE A CADA UNO EN SU SITIO**
Una ruta preciosa.. Espectaculares paisajes e imágenes.. Feliz semana.. :-)))
ResponderEliminarAsí es, Ana.
EliminarNos sorprendió gratamente la montaña central leonesa y sus vistas.
Un saludillo.
¡Buena ruta! Preciosa la foto de la víbora y leyendo he recordado la palabra que me enseño Tere, para definir a los árboles caducos que no pierden la hoja: "querquescentes"
ResponderEliminarUn abrazo, pareja
Así Luisfer, compatiendo experiencias como hacemos, aprendemos todos de todos.
EliminarUn abrazo de 'Ojolince y Sra.'
Buena zona y buena ruta, que ganas tengo de ver una bicha y afotarla, que siempre las encuentro muertas.
ResponderEliminarUn saludo
La zona es bien interesante y atractiva aunque este año, como está sucendiendo en media España, todo esté tan terriblemente seco y pobre de diversidad y número de especies.
EliminarUn saludo de 'Ojolince y Sra.'
Como siempre...preciosa, amena y didáctica. Enhorabuena y un saludo.
ResponderEliminar¡Qué bien, José! Tu valoración enriquece la crónica un montón.
EliminarY 'Ojolince y Sra.' bien agradecidos por ello.
Muchas gracias y un saludo.