Domingo, 29 de Noviembre de 2015
Hace tiempo que 'Ojolince y Sra.' no subimos al pico Valdecebollas de la Montaña Palentina y bien que nos gusta llegar a él, desde cualquiera de sus vertientes.
Parte del grupo de expedicionarios al 'Valdecebollas' encaramados en su Torreón,
de increíbles vistas
Javier, Luisfer, Rubén, Elías, Ojolince
en el inicio de la subida a Peña Rubia ('eSrá' autora de la foto)
A propuesta de quién, y siguiendo su pauta y buenas indicaciones en esta montaña que es como su segunda casa, vamos a abordar la andadura de hoy.
Subimos en dos vehículos hasta La Collada en el Km. 3,5 de la carretera de montaña al Golobar, que es donde vamos a dar comienzo la ruta.
Agujas de hielo en la senda de subida
Cuando bajan las temperaturas y el suelo contiene suficiente humedad se congela, dando lugar a cristales que emergen de entre la tierra a modo de agujas de hielo conocidas como 'pipkrake'.
¡Sin duda, hoy hemos formado un buen grupo de amigos de la naturaleza!
A nuestra izquierda el circo del Golobar, destacando el Sestil Alto y peña Sestil
Vamos dejando abajo La Collada a 1.593 mts. para ganar la cuerda por la que transitaremos esta mañana.
Cuenca y valle formados por el río Camesa en su descenso a Salcedillo
Y pronto comienzan las vistas.
Se abre ante nosotros la bonita cuenca del río Camesa con una pequeña cornisa de nieve.
Es un lugar ideal, cuenta Luisfer, para el aprendizaje y práctica de las técnicas de nieve en montaña.
Seguimos progresando ladera arriba, ahora en dirección oeste y siempre junto al vallado.
El grupo progresa ladera arriba
En algunos tramos sorteando la vegetación propia de la zona, escobas y juníperos de buen porte.
Pocos metros más arriba la vegetación se vuelve más rala, y nos encontramos con los primeros neveros que pisamos esta temporada.
Cuando bajan las temperaturas y el suelo contiene suficiente humedad se congela, dando lugar a cristales que emergen de entre la tierra a modo de agujas de hielo conocidas como 'pipkrake'.
La ascensión no tiene pérdida, seguimos el trazado del vallado
No nos habíamos reunido en anterior ocasión y, sin embargo, la sintonía que da el gusto por la montaña, hace que la empinada ladera que vamos subiendo resulte más llevadera.¡Sin duda, hoy hemos formado un buen grupo de amigos de la naturaleza!
A nuestra izquierda el circo del Golobar, destacando el Sestil Alto y peña Sestil
Cuenca y valle formados por el río Camesa en su descenso a Salcedillo
Y pronto comienzan las vistas.
Se abre ante nosotros la bonita cuenca del río Camesa con una pequeña cornisa de nieve.
'Ojolince' señala...
¡Zorrillo al trote por la ladera de enfrente!
Es un lugar ideal, cuenta Luisfer, para el aprendizaje y práctica de las técnicas de nieve en montaña.
Seguimos progresando ladera arriba, ahora en dirección oeste y siempre junto al vallado.
El grupo progresa ladera arriba
En algunos tramos sorteando la vegetación propia de la zona, escobas y juníperos de buen porte.
Pocos metros más arriba la vegetación se vuelve más rala, y nos encontramos con los primeros neveros que pisamos esta temporada.
¡Ahí tenemos a peña Rubia!
Por la ladera este de peña Rubia vamos atravesando cortos tramos nevados, que aún perduran tras las pasadas nevadas de mediados de mes.
Elías, 'eSrá' y Rubén pisando las primeras nieves de la temporada
Ahí abajo hemos dejando los fértiles valles de Salcedillo y BrañoseraSuperados los neveros ganamos la cuerda de esta sierra que vamos a recorrer.
Y, en pocos minutos, coronamos la planicie que es la cima de peña Rubia.
Cumbre de peña Rubia a 1.937 mts.
Rodeados de espectaculares vistas, vamos a ir recorriendo de este a oeste, el cordal que forma parte de la sierra de Peña Labra o sierra de Hijar.
Desde Peña Rubia el grupo avanza en dirección oeste por la sierra de Peña Labra
Hacia el norte, separada por la cuenca de Hijar, la bonita Sierra del Cordel
Meles meles - Tejón (huellas)
Escasa o ninguna es la probabilidad de pérdida en este recorrido que llevamos y, por si hubiese alguna duda, un madrugador tejón ha dejado bien marcada su huella, llevando el mismo sentido y dirección que nuestro grupo.
Desde aquí podemos comprobar la buena cuenca que se abre hacia el norte, por la confluencia de diferentes valles.
Observando, disfrutando y reconociendo cumbres de la sierra del Cordel
Pequeña escultura hecha con lascas de piedra
En nuestro avance llevamos una buena bandada de Chova piquigualda de un lado para otro, nos alegran con su vista y con su algarabía sonora.
Algún Buitre leonado también se deja ver a esta altitud... ¡¡eso si que es dominar la montaña!!
Sobre este cordal hay algunos cercados, refugios y figuras de piedra que en un tiempo, tuvieron su utilidad.
La vista atrás nos devuelve una atractiva imagen del cordal sobre el que vamos progresando
Casi sin darnos cuenta, hemos superado la cota de peña Astía de 1.925 mts, y nos encontramos en peña Sestil a 2.062 mts.
El grupo en el Sestil. ¡Marco incomparable!
Montaña Palentina, Picos de Europa y sierra de Peña Labra
Un senda bien definida nos va a guiar al Valdecebollas, punto más elevado de esta Sierra de la Cebollera, nombre que recibe la prolongación hacia el sur de la sierra de Peña Labra.
Hacia Sestil Alto y Valdecebollas (sierra de la Cebollera)
El trazado discurre a media ladera del Sestil Alto de 2.112 mts., y nos conduce al tramo final de ascensión al Valdecebollas.
Panorámica de la Montaña Palentina. Espigüete, Curavacas, Peña Prieta...
Progresando hacia la cumbre del Valdecebollas con la sierra de Peña Labra a la derecha
'Ojolince', Luisfer, Rubén, 'eSrá', Elías y Javier
El tiempo acompaña. Ni viento, ni frío intenso están hoy de protagonistas en esta cumbre.
Le enorme planicie del Valdecebollas y sus infinitas vistas
Toca ahora ir descendiendo por la ladera sur del Valdecebollas para descubrir un paraje de singular belleza.
Descenso del Valdecebollas hacia el valle que forma el río Rubagón
Fuentes de la Rodegana de Peñalba con sus casacadasy cortados de Cueto Comunales
Estas praderías de altura están completamente anegadas, en parte por las recientes nevadas y también porque es aquí donde nace el río Rubagón. Es lo que se conoce como Fuentes de la Rodegana de Peñalba.
Por todas partes hay agua.
Un agua pura, fría, limpia... que da vida.
Balcón de piedra sobre el valle del Rubagón
Y eso buscamos pensando que...
¡¡Aquí hay que venir la próxima primavera porque el despertar de la flora y la fauna ha de ser impresionante!!
Del balcón al hondo del valle por el pedregal
Elías y Javier en pleno descenso por el caos de piedra
Con cuidado, vamos a ir descendiendo el caótico tramo pedregoso en que han quedado descompuestas las laderas de Cueto Comunales, hasta alcanzar la hoya del circo del Rubagón.
Zoom a una de las cascadas que forma el río Rubagón en la cabecera del valle
Nuestro esfuerzo se ve recompensado pues, llegados a la cabecera del valle podemos disfrutar de la vista de algunos de los saltos de agua que forma el río Rubagón.
Cabecera del valle del Rubagón que dejamos a nuestra espalda
Dejando atrás cortados y saltos de agua, el avance junto al joven Rubagón que ahora se muestra más sereno y apacible, es un gusto para los sentidos.
Polygala serpillyfolia
Polígala azul o hierba lechera
El verde tapiz sobre el que caminamos está salpicado de tempranas Polígalas muy apetecibles para el ganado y, según creencia popular, útiles para aumentar su leche (de ahí el nombre en griego poly = mucha / gala = leche).
Se dejan ver lavanderas, bisbitas y escribanos pues no les faltan recursos que aprovechar.
La Bodegona, formación rocosa atravesada por las aguas del Rubagón
Algunas formaciones rocosas tienen nombre propio como la curiosa 'Bodegona' donde, según cuenta Luisfer, se han refrescado muchas cantimploras.
El grupo en descenso por la amplia pradería de aprovechamiento ganadero
Y siguiendo el curso del Rubagón, llegamos a la cabaña del Cerezo.
Cabaña del Cerezo, adornada con sus esbeltos abedules
Tras un breve descanso en el Cerezo nos internarnos en uno de los más bellos y mejor conservados bosques de la zona.
Nos internamos en el Monte Calar y atravesamos el Rubagón
Monte Calar es un frondoso hayedo que cuenta con formaciones rocosas de las que tiempo atrás, se obtenían las ruedas de molino.Algunas de ellas, perfectamente talladas, quedaron abandonadas y nos las vamos encontrando a nuestro paso.
El roblón de Peñablanca ha conocido a varias generaciones
Buenos ejemplares de acebo y de roble se intercalan entre las hayas, ambientando el paseo.Transitamos por el hayedo desnudo de hoja y con escasa luz
De nuevo, Luisfer nos muestra otro de los buenos aprovechamientos del monte, la seta Lengua de vaca o Gamuza blanca.
De pie robusto, sombrero duro y forma variable, recubierto de fina vellosidad, ambos de carne blanca.
Hydnum repandum var. albidum - Lengua de vaca
Su característica más notable es que el himenio (cara inferior del sombrero) está tupido de aguijones cilíndricos fácilmente desprendibles, como se ve en la foto.
Es buen comestible, apreciado en la zona, y suele aparecer semienterrado formando corros en bosques caducifolios, también de encinas o de coníferas.
Iluminado el chozo de Las Mesucas
Y un descubrimiento tras otro, nos lleva al paraje conocido como Las Mesucas.
Cuadrangulares formaciones pétreas que parecen haber sido perfiladas por la mano del hombre.
Visitamos el chozo que se yergue sobre una de estas grandes rocas y nos brinda excelentes vistas.
Monte Calar a nuestros pies y la sierra recorrida con peña Rubia al fondo
Como son las cuatro y media y nos quedan poco tiempo de luz, nos internamos de nuevo en el monte a pisar hojas y musgos por doquier.
El verde de algún ejemplar de Tejo, destaca en el hayedo
'eSrá' en una trampa de hojarasca
Con la consecuente complicación que esto supone, cuando uno no sabe muy bien donde pone los pies...
Bonito yesquero
A la salida del bosque, cambiamos al valle del arroyo de Pamporquero
Puente que nos permite cruzar el arroyo Pamporquero
Es el camino de la Mata del Fraile que nos devolverá a Barruelo con las últimas luces del día.
Este último tramo le realizamos de forma algo precipitada y no dejamos constancia gráfica.
Barruelo de Santullán esperándonos en el valle
Muchos enclaves, detalles y panorámicas que hoy hemos disfrutado, merecen un mayor detenimiento y admiración.
PLANO Y PERFIL DEL RECORRIDO
El recorrido seguido está dibujado en linea roja
DISTANCIA TOTAL -> 19,50 Kms. ASCENSIÓN ACUMULADA -> 948 mts.
TIPO DE TRAZADO -> Travesía DIFICULTAD > Media
TIEMPO TOTAL -> 8 h. 25' DESCARGA DEL TRACK
No debéis perderos la versión que de esta ruta nos narra Javier Ureta en buen lenguaje montañero y que podéis encontrar en su blog PASEOS POR LAS MONTAÑAS, desde hace ya algunas fechas.Nos despedimos, como no puede ser de otra manera, con una panorámica en la que cabe casi todo!!
Ojolince y Sra.
**SED CONSCIENTES DE VUESTRAS LIMITACIONES PORQUE LA MONTAÑA PONE A CADA UNO EN SU SITIO**
Variada y espectacular ruta por la montaña Palentina, como siempre contada con detalle y entusiasmo. Un saludo.
ResponderEliminarNos nos cansamos de 'la Palentina' y, cuando es de la mano de un gran conocedor como Luisfer, el resultado no puede ser más satisfactorio.
EliminarMuchas gracias José y un saludo de 'Ojolince y Sra.'
Fenomenal ruta. Me ha encantado. De esas rutas que tienen paisajes diversos, son las mejores. El Rubagón, precioso. Y la cima, espectacular con esos grandes mojones. Abrazo
ResponderEliminarTambién nosotros quedamos sorprendidos de la diversidad de paisaje que pudimos recorrer. Varias veces habíamos subido el Valdecebollas y siempre con acierto de recorrer los inmensos bosques que tiene a su alrededor.
EliminarNos faltaba por conocer el entorno de Peñalba y la fuentes del Rubagón así como monte Calar y, de todo ello, hemos vuelto encantados... Esta primavera habrá que desentrañar sus secretos. ¿Te apuntas?
Un abrazo.
Es posible. No lo descartéis. Avisadme!!
EliminarPreciosas imágenes. Una ruta muy bella e interesante.. :-)))
ResponderEliminarDices bien, Ana. Muy interesante nos ha parecido esta parte de la montaña Palentina que tenemos aún pendiente de desentrañar. ¡Magníficos bosques con manantinales y pastizales que albergan mucha vida!
EliminarAgradecidos por tu visita.
Un saludito de 'Ojolince y Sra.'
Buena entrada, pareja. Un lujo caminar junto a vosotros y los demás integrantes del grupo, y luego leer en vuestro blog todas las cosas que sin salir de allí, yo no veo. Como bien decís, esto hay que repetirlo. Primavera y otoño son dos momentos espectaculares en estos lares. ¡Hasta la próxima!
ResponderEliminarNo nos queda ninguna duda que vamos a repetir... Invierno, primavera, cuando convenga, ya sabes que somos 'todo terreno'. Aunque es cierto que nos gustaría mucho recorrer el entorno de las fuentes del Rubagón en cuando vuelva a despertar la vida tras los rigores invernales.
EliminarEl placer de compartir ruta contigo (y con el resto de los buenos amigos del grupo), explicándonos y atendiendo cada una de nuestras preguntas ha sido otro de los factores que le han hecho ganar puntos a esta bella montaña y, por supuesto, a nuestro resumen.
Un abrazo y hasta pronto.
Al Valdecebollas también he subido yo, pero desde el refugio de Golobar y en primavera, disfrutando de los reptiles.
ResponderEliminarPareja, os tenéis que dejar barba que sois los únicos que salís en las fotos con el mentón despejado. Jajajajaa
Saludos desde el norte.
En las fuentes de la Rodegana de Peñalba anduvimos buscando herpetos pero tendremos que esperar a primavera para disfrutar de un mejor conocimiento de la zona, que promete.
Eliminar'Ojolince' tendrá más fácil lo de la barba que 'eSrá'.
Agradecidos por tu norteña visita Goyo!!
Que buena ruta que os hicisteis, como me hubiese gustado acompañaros, pero esa misma noche tenia que currar y era demasiado justo el tiempo. Un saludo
ResponderEliminarNos salió redonda.. claro que con un gran conocedor de la zona no podía haber sido de otra manera.
EliminarA ver si pronto coincidimos que ya toca!!
Un abrazo, Luis.
No puede haber habido mucho años en los que pisais nieve por primera vez tan tarde. Muy bien aprovechada la ocasión como siempre.
ResponderEliminarCheers
Sam & Dave
¡Es cierto, Sammy! Cada año toca más tardeee!!
EliminarMuchas gracias por tu visita.
'Ojolince y Sra.' te deseamos un feliz año nuevo.
Una preciosa crónica de vuestras envidiables andanzas entre brezos, cytisus scoparius y cantabrica , robles, acebos .....además el día, por lo que veo, os acompañó en lo que a meteorología se refiere. Todo redondo.
ResponderEliminarUn abrazo desde Cantabria
Pudimos disfrutar de un día de sol y temperaturas envidiables, poco común para esa fechas. Parece que ya está llegando el clima que corresponde, asi que habrá que cambiar de tercio, tanto en montaña como en observación.
EliminarNos alegra que te haya gustado el reportaje, Javier.
Un abrazo de 'Ojolince y Sra.'
Me encanta volver a recordar esta bonita ruta con vuestro reportaje, pues aparte de coronar Valdecebollas disfrutamos de un bonito descenso por el valle de Rubagón que nos sorprendió a todos.
ResponderEliminarAgradecimientos a nuestro particular guía Luisfer.
Un abrazo,
Javier
Tuvimos todos los factores a nuestro favor... la meteo, el guía, el acertado recorrido, las vistas, el animado grupo, para que el resultado resultara tan satisfactorio.
EliminarContentos todos y con muchas ganas de proyectar alguna de esas salidas que tenemos en mente.
Un abrazo de 'Ojolince y Sra.'